Rocío Carrasco ha tratado de mostrar una imagen lo más amable posible en el especial de Montealto. En realidad ha guardado toda la artillería para más adelante, para la segunda temporada de su docuserie. En ella tiene previsto hablar de todo aquello que preocupaba a su madre, sin valorar los daños que pueden generar sus palabras.
En un primer momento, algunos medios aseguraban que este especial sobre la antigua casa de la Jurado formaba parte de dicho documental. Pero Carlota Corredera se encargó de desmentirlo la semana pasada. La segunda parte de la serie de Rociíto no tiene nada que ver con lo que se está viendo estos días en Telecinco.
Incluso se llegó a barajar la posibilidad de que cancelaran su emisión, sobre todo tras el revuelo generado por las palabras de Rocío Carrasco. Hubo incluso amenazas de demandas por parte de los posibles perjudicados en el caso de que vieran la luz ciertos documentos. Pero eso tampoco parece preocupar en exceso a la cadena.
Mediaset trata de exprimir al máximo la vida de 'La más grande'. Incluso 16 años después de su muerte.
Se habían contemplado una serie de plazos para la emisión de la segunda parte de la docuserie, pero en ningún momento se han cumplido. La fecha que habían escogido era el pasado otoño, pero todo ha quedado en punto muerto. Hay que decir que las grabaciones ya han finalizado y aún no se conoce cuándo se entrenarán las nuevas entregas.
Mientras tanto, Rocío Carrasco se tiene que conformar con destapar ciertos recuerdos del pasado. A través de una recreación realiza una incursión por la casa que tenía la familia en La Moraleja. Y una de las citadas estancias le puede ayudar a conectar con su documental.
En el buró de la habitación de su madre se localizaban los documentos que harían temblar a muchos de sus familiares. Unos papeles, que como ella ha reconocido, ayudarían a "conocer la verdad" en el caso de hacerse públicos.
Todo apunta a que los principales perjudicados por dichos diarios serían Ortega Cano y Amador Mohedano. Está dispuesta a colocarlos en el "paredón mediático", como recoge ABC. Con todos los datos que tiene en su poder, el que peor parado saldría de todo esto sería el torero.
En las últimas semanas se han ido conociendo algunos detalles de su relación con la chipionera. Al parecer, él se habría negado a ayudarla económicamente cuando se desplazó a Houston a tratarse de su enfermedad. Sería un gesto que su mujer nunca le perdonaría.
Pero detrás de esa idílica relación se esconderían muchos más secretos que pueden conocerse dentro de muy poco tiempo.
Rocío Carrasco no tiene miedo a hablar
Rocío Carrasco ha dejado entrever que los documentos que tiene en su casa pueden dejar en muy mal lugar a muchas personas de su entorno. Según desvela el citado medio, Ortega Cano estaría muy preocupado por ello.
Comprueba como las advertencias legales no han llegado a inquietar en ningún momento a la ex de Antonio David. Tanto ella como la cadena parecen dispuestos a seguir adelante con la emisión de dicho contenido.
Otra de las grandes protagonistas de este espacio será Raquel Mosquera. Estuvo casada con su padre, y la relación entre ellas tampoco acabó de buenas maneras.
Rocío Carrasco tiene que saldar unas cuantas deudas pendientes con sus enemigos, y lo hará en televisión. Está empeñada en manchar la imagen de muchas de las personas que estuvieron a su lado durante la etapa de juventud.