Ramón García despidió el 2021 como uno de los peores años de su vida. Tuvo que enfrentarse a la pérdida de su madre y a una separación matrimonial.
Se había propuesto pasar página y empezar de cero con la llegada de 2022, pero no parece que sea sencillo.
Y es que casi todas las semanas se encuentra en las revistas alguna foto de su exmujer con su nueva pareja. Patricia Cerezo lleva varios meses saliendo con el ingeniero de Tuenti Kiko Gámez, y entre ellos la relación marcha viento en popa.
Para sorpresa de Ramón, la que había sido su esposa durante tantos años tardó muy poco tiempo en recuperarse de la ruptura. Consiguió rehacer su vida con otra persona en cuestión de semanas. Ahora, son habituales las imágenes de ambos en actitud cariñosa.
Recientemente se les pudo ver saliendo a comer y regalándose besos y abrazos, como si se trataran de unos adolescentes. Da la sensación de que Patricia trata de recuperar el tiempo perdido. La relación va tan en serio, que al poco tiempo de empezar a salir ella ya les presentó a sus hijas y a su madre.
Esto demuestra que Kiko está muy integrado en su familia y que ella se encuentra muy cómoda a su lado. Se la ve radiante y con ganas de hacer cosas. Hace unos días la pareja compartía velada con la madre de Patricia y no tuvieron inconveniente en mostrarse naturales.
Se dedicaron gestos de cariño y miradas cómplices, como recoge la revista Semana. El presentador de televisión, por su parte, trata de llevar lo mejor que puede esta nueva situación. Se le hace duro ver a la que fuera su compañera en brazos de otro hombre.
El desgaste en la relación fue el motivo esgrimido por la pareja para justificar la ruptura. Pero Ramón García comprobó como en muy poco tiempo la exazafata se ilusionaba con este nuevo amigo. Eso hizo sospechar a más de uno sobre una posible infidelidad por parte de ella.
La nueva pareja de Patricia es vecino de Pozuelo de Alarcón y trabaja en Tuenti como director de marca global y product marketing. El hecho de que la ex del presentador le haya presentado ya a toda su familia es un indicativo de algo importante. Demuestra que se trata de un noviazgo estable y con proyección de futuro.
También es habitual que se dejen ver juntos en fiestas con amigos y en la noche madrileña. Algo que no era tan común cuando ella vivía con el vasco. Era más discreta y posiblemente no tuviese una vida social tan activa.
Pero su estado ha dado un giro radical en los últimos meses. Afronta una nueva etapa, en donde parece que se ha quitado de encima unos cuantos años.
Ramón García trata de mantener unida a la familia
Ramón García anunciaba el pasado verano que su matrimonio se había roto después de 24 años de relación. No obstante, mostró su intención de seguir teniendo un vínculo con su ex. Lo decía sobre todo pensando en el bienestar de sus hijas.
De hecho, se mudó a una vivienda cercana a la de su exmujer para poder estar con ellas. Así no habría motivos para que hubiera un distanciamiento con las jóvenes.
Una vez anunciada la separación se les pudo ver juntos en alguna ocasión. Uno de esos días fue durante el cumpleaños de su hija Natalia, que celebraba la mayoría de edad. Posaron ante los medios con mucha normalidad, como si no hubiera ocurrido nada.
Para superar este mal trago, Ramón García se ha refugiado en el trabajo. Allí consigue evadirse de los problemas que le persiguen desde el año pasado.