Carlota Corredera ha ido perdiendo adeptos por el camino. La audiencia le ha dado la espalda a Sálvame los días que ella se ponía al frente del programa. Pero también se ha encontrado con la traición de algún compañero con el que mantiene una relación muy distante.
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Hay un colaborador del espacio que trata de esquivar a la viguesa, se trata de Kiko Matamoros. Entre ellos hay muchas diferencias y sus puntos de vista tan distintos les acaban separando. Tratan de mantener las formas, pero la situación puede tildarse ya de insostenible.
Durante las últimas semanas Carlota ha tenido que presentar Sálvame en bastantes ocasiones ante las ausencias de Jorge Javier y Paz Padilla. Y como han podido comprobar los espectadores, en ninguna de esas ocasiones estaba presente Kiko.
Han tratado de evitarse en el plató de Telecinco. Hasta la fecha parecía que la presentadora iba ganando terreno en esta batalla, pero todo puede dar un giro en cuestión de días. La intención es que ella deje de tener tanto protagonismo delante de las cámaras.
Así lo dejó entrever el pasado sábado en el DeluxeJorge Javier. De sus palabras se puede extraer que Corredera ya no presentará tan frecuentemente el espacio diario. Esto le dejaría el camino libre a Matamoros.
El presentador catalán le dijo que a partir de ahora iba a trabajar más en Sálvame. Todo ello sin mencionar en ningún momento a la contrincante del colaborador.
Hay varios motivos que pueden explicar la menor presencia de la viguesa en el formato diario. Existe la posibilidad de que Paz Padilla regrese tras unas semanas alejada de Telecinco. La cómica gaditana estuvo muy centrada en el nuevo concurso de Cuatro, en donde las grabaciones le han robado mucho tiempo.
También existe otra posibilidad. Y es que a Carlota Corredera le haya surgido otro proyecto laboral.
El otoño avanza y en Mediaset tienen previsto estrenar las próximas semanas la segunda parte de la docuserie de Rocío Carrasco. El regreso cada vez está más cercano, y lo más probable es que ella vuelve a ejercer de presentadora.
Al margen de todo esto, y de las polémicas que pueda generar, en La Fábrica de la tele y en Telecinco siguen confiando en ella. No obstante, cada vez es más visible el desencanto de los espectadores, que no dudan en darle la espalda a Sálvame.
Carlota disfruta de unos días de descanso ajena a los rumores
Carlota Corredera trata de huir de los rumores y especulaciones que surgen sobre su persona. El pasado fin de semana se le pudo ver en su tierra disfrutando de unos días de descanso. Siempre que puede se acerca hasta Vigo para estar junto a los suyos y deleitarse con la gastronomía gallega.
Al margen de la persona que se ponga al frente del magacín, lo que está claro es que Sálvame se enfrenta a un momento convulso. Una parte de la audiencia se ha posicionado en su contra, y las redes sociales llaman a realizarle un boicot.
El descarado posicionamiento hacia Rocío Carrasco tras la emisión de su documental ha levantado mucha polvareda. A ello se le une el fulminante despido de Antonio David, al que la justicia le acabó dando la razón.
La propia Carlota no tuvo inconveniente en acusarle de maltratador sin respetar la presunción de inocencia. Algo que una parte de la audiencia no perdona ni olvida.
El formato, que ya cuenta con más de 12 años de vida, empieza a estar muy desgastado. Los constantes cebos y enfrentamientos entre los colaboradores acaban resultando muy pesados para los espectadores. Así queda comprobado con las caídas de audiencia.
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