Sara Carbonero eclipsó a los medios de comunicación a su llegada a los Premios Hombre del Año de la revista Esquire. La periodista llegó con unos espectaculares pantalones dorados, dispuesta no perderse una de sus citas más importantes.
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Posó sola en el photocall aunque en el recinto la esperaba Kiko Morente. La presencia del cantante se debía a su profesión, pues lo vimos subido al escenario para interpretar la canción Corazón Partío.
Una actuación en homenaje a su gran amigo Alejandro Sanz y con la que hizo las delicias de Sara Carbonero. Por el momento, la periodista se niega a hablar sobre su vida sentimental, pero sí que hizo balance de estos ocho meses tras su separación. Unas palabras que quizás, no le hayan gustado mucho a su exmarido, Iker Casillas.
Sara Carbonero y su mensaje velado
El pasado mes de marzo, la revista Lecturas anunciaba en exclusiva la separación de Sara Carbonero e Iker Casillas. Una ruptura sentimental que sorprendió a la prensa y que señaló posibles infidelidades del futbolista.
Durante estos ocho meses, la pareja ha hecho vida por separado. Han cambiado de grupos de amigos y hasta ha habido tiempo para nuevas ilusiones. Como por ejemplo, la supuesta relación de Sara con Kiki Morente.
En medio de todo esto, lo que prima por encima de todo es el cariño que todavía existe entre la periodista y el futbolista. Al menos es lo que demostró Sara cuando fue preguntada por el piropo que le lanzó Iker hace unos días. "No tiene por qué decir cosas feas", aseguró, dejando claro que existía una buena relación con su exmarido.
Aunque Carbonero no ha confesado si mantiene una relación sentimental con Kiki Morente, lo cierto es que se deshace en halagos hacia él. Reconocía que era un hombre "con sentido del humor, honesto y sensible", adjetivos clave que Sara busca en una pareja.
Sara Carbonero, dispuesta a seguir adelante
Sara tiene muy claro que su objetivo es ser feliz. Cierto que la separación fue un duro trago para ella, pero no quiere que su vida se paralice por ello. Más aún después de la lucha que ha mantenido para superar los peores meses de su vida.
Lo llamativo es que la periodista es la única que se deja ver con amigos o con su nueva ilusión, aunque la última vez que los vimos, parecía haber problemas entre ellos. Mientras tanto, el exportero permanece alejado del foco mediático después de protagonizar varios enfrentamientos con la prensa.
Está claro que Sara está feliz con su nueva vida y de sus palabras se desprende que el futbolista forma parte de su pasado. "Es un momento dulce, tranquilo, un momento de ilusión, tengo mucha ilusión con mi trabajo, estoy contenta", aseguraba.
Es consciente de que la relación con su exmarido no puede ir más allá que mantener una buena relación por el bien de sus hijos. "Está todo normal, natural, estupendo... la relación que tiene que haber", decía contundente sin dar lugar a nada más entre ellos.
Sara Carbonero se encuentra radiante y feliz, fiel reflejo de que tiene más que superada su ruptura matrimonial. Está centrada en su trabajo y en aprovechar al máximo ese "momento dulce" que atraviesa, dejando atrás su pasado más reciente.
Bien podría haber posado junto a Kiki Morente en los Premios Hombre del Año, pero ambos optaron por la discreción. Llegaron por separado e igualmente se marcharon, pero seguro que dentro disfrutaron de la velada junto a amigos y conocidos.
Mientras tanto, Iker Casillas es testigo directo de como Sara rehace su vida y encuentra motivos más que suficientes para volver a sonreír.
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