La periodista Sara Carbonero en un evento de la firma Calzedonia el 9 de mayo de 2019

Sara Carbonero habla de su peor año con un curioso mensaje

La esposa de Iker Casillas comparte un precioso poema que la define a la perfección

La periodista Sara Carbonero en un evento de la firma Calzedonia el 9 de mayo de 2019
Sara Carbonero ha compartido un precioso poema de Miguel Gane | España Diario

La vida de Sara Carbonero no ha sido nada fácil este último año. El año pasado la periodista vivió momentos muy complicados, después de que su marido Iker Casillas sufriera un infarto y a ella le detectaran un tumor por el que tuvo que ser intervenida de urgencia en mayo de 2019. 

Durante todo este tiempo, la presentadora ha afrontado la vida con optimismo y positividad, como ha ido demostrando estos 365 días a través de las reflexiones a las que nos tiene acostumbrados. Instagram ha sido una vía de salvación para la periodista. Mediante imágenes y fragmentos de canciones y poemas ha convertido su vida en auténtica poesía. 

La presentadora, que ya ha dejado atrás los días grises y oscuros ha querido compartir con sus dos millones y medio de seguidores un poema de Miguel Gane bajo el nombre de Sara que la define a la perfección. A continuación, podéis leer el poema con el que se ha identificado la esposa del exportero del Real Madrid:

«A las cosas pequeñitas

tú las haces grandes, enormes, saragníficas.

En los días grises,tú eres un paraguas de esperanzay saranidad.

Elijo Sara para viajar al centro de la tierra

porque su sonrisa es epicentro.

Pido Sara para encabezarla revolución de las flores

y así decir:

«Sara, sin ti las rosas serían marrones».

Mañanas de Paracetamol,

agua y mucha Sara,

porque menudo saraote pillaste anoche,

y vaya resacara esta mañana.

Sara como sobredosis

de cualquier adicto a las curvas.

Suena Saratoga

cada vez que te tocas,

porque sin ti todo es Antártida.

Sabes como la estrella de los tejados,

eres lo más Sara’n roll de por ahí,

te sientes presumida

y te quieres carmesí.

Sara para salvar ballenas

y decir «Ballenas, ¿cuál es vuestro oficio?».

Prefiero Sara a la poesía,

me confieso un saráticode su forma de llevarse el pelo

por detrás de la oreja.

Escribir sarógrafia

como el más sutil deseo,

como la más virgen propuesta.

Sara expuesta como un cuadro en el Louvre:

y que todos digan: «Vaya Sara de arte».

Estar en modo aleatorio

y que aparezca Sara.

Sara de portada en Vanity,

porque sus piernas sí que son un sarastáculo.

Sara para echar de menos,

porque todo lo que es capaz de ofrecerte Sara

no te lo dará nadie.

Sara para los que no se conforman con poco.

Sara sin límites.

Sara para siempre.

Sara haciéndose eterna.

Bailando».