Rocío Carrasco volverá a rescatar este viernes unas cuantas historias del pasado. En la primera entrega de Montealto: regreso a la casa se adentraba en la réplica de la que había sido su habitación en el chalet de La Moraleja. Ahora será el turno de abrir otras estancias de la vivienda, como son el vestidor, el salón, el comedor y el dormitorio principal.
Y todo apunta a que habrá momentos para recordar encuentros familiares, pero también para destapar ciertos asuntos que ya estaban olvidados. Son muchos los detalles que se acumulaban en ese inmueble, donde empezarán a tener más protagonismo sus hijos, Ortega Cano o Amador Mohedano.
En esta ocasión, el formato alargará su emisión hasta alcanzar las cuatro horas. El pasado martes, Rocío Carrasco ofrecía un pequeño aperitivo de apenas 60 minutos en donde pudo vérsele un tanto nostálgica. Pero el contenido amable y sentimental del primer capítulo puede dar paso a una situación de confrontación.
Hasta ahora solo ha hablado de ella y de los buenos recuerdos que tenía de su habitación en el inmueble de La Moraleja. Pero al abrirse nuevas estancias empezarán a surgir los nombres de otras personas.
Durante los últimos meses se ha hablado mucho de los espectaculares vestidos y de las joyas que dejó Jurado. Su cuñada, Rosa Benito, fue la que más detalles aportó sobre el armario de la cantante. Cuando se descubra el vestidor, posiblemente tenga muchas cosas que decir al respecto.
Otro lugar del chalet que esconde muchos secretos de la vida de la chipionera es el comedor. Allí se encargaba de reunir en múltiples ocasiones a su familia. Y como es lógico, este espacio esconde muchos secretos que irán saliendo a la luz.
Rocío Carrasco tiene la oportunidad de confesar cómo era el día a día en ese lugar y los problemas que llevaron a dividirles. A través de las fotografías que decoraban el salón podrá, además, analizar a los personajes y las situaciones. Fue un sitio de encuentro y de muchas reuniones con los seres queridos, donde 'La más grande' desempeñaba un papel esencial.
Tendremos la oportunidad de descubrir algunas de las intimidades que se vivieron allí. Aunque la artista no tenía reparo en abrir las puertas de su casa a la prensa, ahora se podrán conocer más detalles de su pasado. De ello se encargará su hija, que tiene la oportunidad de rescatar algunos episodios ocultos para el público.
Pero todos los focos se concentrarán en una estancia que promete dar mucho que hablar. Se trata del dormitorio que compartió Jurado con Ortega Cano. Hay muchas cuentas pendientes entre la esposa de Fidel Albiac y el torero.
Quizás sea el momento adecuado para cobrárselas. En alguna ocasión ya había advertido de que hablaría de todo lo que había ocurrido en esa vivienda. Lo que se entendió como un aviso para el que fuera marido de su madre.
Rocío Carrasco puede hablar claro sobre sus hermanos
Rocío Carrasco se adentrará en un terreno bastante peligroso. En la primera temporada de su docuserie confesó que Jurado no debería haberse casado con el torero. Sin embargo, reconocía que siempre quiso lo mejor para su madre.
En el cuarto habrá también espacio para la nostalgia. Tal vez desvele secretos del matrimonio que nunca habían sido abordados hasta la fecha. Tiene la oportunidad de revelar si era cierto que la cantante tenía previsto separarse de Ortega Cano.
No hay que olvidarse de los documentos secretos que guarda y que amenazó con sacar en más de una ocasión. En ellos, la chipionera se desahogaba y hablaba sin tapujos de su esposo y del resto de la familia.
Además, otros que estarán muy pendientes de Rocío Carrasco serán José Fernando y Gloria Camila. En toda esta historia se han sentido un tanto desplazados por su hermana.