Kiko Hernández siempre ha sido muy discreto con su vida íntima. Nunca ha hablado en público de sus romances ni noviazgos. En alguna ocasión se le ha fotografiado con alguna chica, pero nunca quiso aclarar si eran solo amigos o había algo más entre ellos.
Para conocer la última relación seria del colaborador de Sálvame hay que remontarse hasta 2002. Fue uno de finalistas de la tercera edición de Gran Hermano. No pudo llevarse el maletín con el premio final, que acabó en manos de Javito, pero sí que se llevó una bonita historia de amor.
Kiko había iniciado en el interior de la casa un romance con Patricia Ledesema. Vivieron con mucha intensidad aquella relación en el reality, pero una vez que salieron, la situación fue muy distinta.
Parecía que nada podría detener a esa pareja, que desde el principio se mostró muy fogosa. No hay que olvidar que fueron los primeros en practicar edredonig en Gran Hermano. Todo el mundo estaba muy pendiente de ellos.
Eso, quizás, fue también los que permitió llegar hasta la final. Se había creado mucha expectación en torno a ellos. Comprobaron como la audiencia les respaldaba semana tras semana, y optaban por eliminar a todos aquellos con los que mantenían una relación más distante.
Desde entonces, la vida sentimental de Kiko Hernández es todo un misterio. Solo se conoció la relación con Patricia, y de manera pública nunca se ha conocido a ninguna otra mujer. En la actualidad, él es padre soltero de dos niñas.
Siempre que sus compañeros de programa se interesaban por su estado civil trataba de arrojar balones fuera. Incluso en alguna ocasión, a preguntas de Jorge Javier, confesaba que llevaba un tiempo largo sin mantener relaciones sexuales. Trataba de normalizar la situación, sin preocuparle lo que pudieran decir los demás.
Kiko Hernández sacó beneficio a su participación en el reality
Kiko le sacó rédito a aquella historia de amor, pero nadie pone en duda su valía para hacerse un hueco en la televisión. Puede decirse que es el único concursante del reality que ha podido vivir de la fama tras encadenar casi 20 años en la pequeña pantalla.
Nada más salir de Guadalix comenzó a trabajar como tertuliano en el debate de Gran Hermano 4 y en Crónicas Marcianas. Más tarde llegarían A tu lado y Sálvame, su último destino. Después de tanto tiempo se ha convertido en uno de los rostros más reconocidos de Telecinco.
En la medida de lo posible evita hablar de su paso por la casa. Unas semanas después de salir del concurso se acaba poniendo el punto y final a su historia con Patricia. Y no lo hicieron precisamente de buenas maneras.
Los cruces de acusaciones entre ellos fueron constantes durante una época. Y en esta historia apareció una tercera protagonista, la madre de ella. Encarni Manfredi aprovechó el tirón de Kiko Hernández para hacerse unos cuantos platós y participar en Hotel Glam.
Ella fue muy dura que el colaborador de Sálvame. El enfrentamiento entre suegra y yerno llegó incluso a los tribunales. En 2019 conseguirían enterrar el hacha de guerra poniendo el punto y final a unos cuantos años de enfrentamientos.
El presentador fue el encargado de pedir perdón a la madre de Patricia, en un gesto que provocó la emoción de Encarni. "Como el daño fue público, han pasado 17 años, te pido disculpas por todo lo que te hice en aquella época", apuntó.
En la actualidad, la que fuera novia de Kiko Hernández está casada con Roberto Zapata, con el que tiene dos hijos. Después de participar como tertuliana en algún espacio de Telecinco decidió apartarse de la tele en 2007.
En la actualidad se gana la vida como coach y nutricionista, dando consejos a sus seguidores en las redes sociales.
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