Marta Riesco ha dicho basta. La continua presión mediática le ha pasado factura y ahora se ha visto obligada a tomarse un respiro. La reportera tuvo que hacer frente a una semana muy dura que le ha llevado a solicitar la baja médica.
Este miércoles acudió a una clínica de salud mental de Madrid, como recoge Look. "No estoy bien", confirmó al citado medio. Fueron muchos los asuntos que tuvo entre manos durante los últimos días.
Los rumores sobre una posible ruptura y un enfrentamiento en directo con Anabel Pantoja le causaron una gran ansiedad. Marta fue incapaz de gestionar la situación que se le vino encima.
En su momento había optado por darle normalidad a su relación con Antonio David Flores. Pero su nombre estaba en boca de todos desde que se publicaran unas fotos del exguardia civil entrando en su casa. Se llegó a responsabilizar a Marta Riesco de la separación de su chico con Olga Moreno.
Ella siempre ha insistido en que quería mantenerse al margen de todo para continuar con su carrera como periodista. Pero de una u otra manera se ha encargado de alimentar este interés mediático.
Muy reacia a hablar sobre su romance en el programa en el que trabaja, el pasado martes Marta Riesco sorprendía a todos al intervenir en Sálvame. En una conexión en directo desde Vitoria, se le pudo ver excesivamente tensa, participando en un enfrentamiento con la sobrina de la Pantoja.
Posiblemente este episodio y el disgusto tras conocer la reacción de su madre a su relación con Antonio David le hayan llevado a tomar esta medida. Coger una baja laboral que le obligará a estar un tiempo fuera de la televisión.
Marta Riesco se ha visto muy desbordada por todo lo ocurrido. Después de la acalorada discusión con la colaboradora, la reportera, que permanecía en Vitoria trabajando, se volvió a Madrid precipitadamente. Permanecía en tierras vascas cubriendo la última hora de la relación de Urdangarin.
Hubo algo que le llevó a hacer las maletas y retornar a la capital. Es posible que no fuera el lugar más idóneo para ella en estos instantes. Era el foco de todas las miradas, rodeada de compañeros periodistas deseosos de sacarle alguna palabra interesante.
A esto se le añade el malestar que podrían tener los responsables de El programa de Ana Rosa. No verían con buenos ojos la intervención de Marta Riesco en Sálvame, y más cuando hay una gran rivalidad entre productoras.
Joaquín Prat explicaba que se había tomado el día libre, pero por la tarde reaparecía en Ya son las 8. Se le pudo ver mucho más seria de lo normal. Atrás quedaba la actitud de aparente normalidad que había tratado de mostrar durante las últimas semanas.
Marta Riesco tratará de alejarse del foco mediático
Marta Riesco se encargó de confirmar a los compañeros de Look que se tomará un tiempo antes de volver a la rutina. "Sí, he parado", reconocía. Se encuentra muy afectada por los últimos acontecimientos.
Ha tratado de que se le valorara por su labor como periodista, pero su acercamiento a Antonio David Flores le convierte en un personaje de tirón. Ahora ha apostado por dar un paso atrás y refugiarse en su casa.
Queda por ver cómo reaccionan sus compañeros de programa, que siempre han sido bastante críticos con su gestión. Nunca entendieron que no diera la cara ni que no hablara claramente sobre su romance para acabar con todas las especulaciones.
Marta Riesco espera que el revuelo mediático generado desaparezca lo antes posible. Solo así podrá volver a recuperar la normalidad en su día a día.