Kiko Hernández ha querido tomarse un merecido descanso en este comienzo de año. Le espera un 2022 repleto de proyectos, de ahí que haya decidido hacer las maletas para irse a Lanzarote. Lo que todavía no se sabe es si lo ha hecho solo o en compañía de Jimena y Abril.
Con estas pequeñas vacaciones sigue los pasos de otros compañeros que también optaron por esta isla para desconectar en las últimas semanas. Fue el caso de Marta López o Matamoros, que no pudieron resistirse al clima de Canarias.
Por lo visto en las imágenes que ha compartido, Kiko se lo está pasando en grande. Piscina, sol y buena gastronomía componen el día a día del colaborador de Sálvame. Más de un seguidor ha sentido auténtica envidia con sus fotografías.
Para disfrutar de estas jornadas de relax ha escogido un hotel equipado con todo tipo de lujos. Se trata de un alojamiento de cuatro estrellas compuesto por villas y apartamentos. Situado en una de las zonas más tranquilas de Lanzarote, en esta época el precio por noche no baja de los 120 euros.
El exconcursante de Gran Hermano tiene a su disposición piscina climatizada, jacuzzi exterior, camas balinesas, spa o pistas de pádel. En una de sus últimas publicaciones en Instagram aseguraba que era una "increíble forma de empezar el 2022. Me he tenido que portar muy bien para que los Reyes me regalen una estancia en una villa del mejor hotel de Lanzarote", explicaba.
Mostraba su agradecimiento a todo el equipo del establecimiento "por hacerle sentir como en casa". Pero sin lugar a dudas, lo que más valoraba era la temperatura que tenía de 26 grados. En la imagen que compartía aparecía delante de una mesa repleta de manjares para desayunar.
Lo que no quiso desvelar Kiko Hernández es si se encontraba solo o en compañía. Es posible que dejara a sus hijas Jimena y Abril en Madrid, al cuidado de las personas que tiene contratadas para ello. En cualquier caso, el alojamiento escogido dispone de unos cuantos espacios para que las pequeñas puedan divertirse al máximo.
El colaborador de Sálvame aparece más sonriente que nunca. Apartarse del programa durante unos cuantos días le ha sentado de maravilla. Ha podido desconectar de la tensión que soporta en el espacio vespertino de Telecinco.
Se le ha podido ver muy relajado al frente de una barbacoa o con unos camellos. Eso sí, cada vez le queda menos para enfrentarse a la realidad. Y es que en los últimos días le han llovido las críticas por parte de sus compañeros.
Kiko Hernández tendrá que responder en Sálvame
La semana pasada Kiko Hernández anunciaba en una revista que había comprado una casa por valor de 2,5 millones de euros. Se trata de una vivienda de planta baja, que le facilitará mucho la labor con Jimena y Abril. Ya no tendrá que preocuparse de subir escaleras, algo que le resultaba muy molesto por sus problemas musculares.
Pero los contertulios del programa no estaban irritados por el precio del chalet, sino por la decoración del mismo. Dijeron que era horrible y que estaba muy anticuado. No entendían que pudiera tener tan mal gusto.
Todo esto lo dijeron mientras él se encontraba de vacaciones. Seguro que cuando regrese del descanso se encarga de responderles a todos ellos. Las ganas no le faltarán.
En cualquier caso, no parece ser que sea la casa definitiva de Kiko Hernández. Él mismo ha confesado que le encantan las mudanzas y que posiblemente no aguante más de tres años en ella. Posiblemente ya esté mirando su próxima residencia.