Antonio Canales era despedido este miércoles de Sálvame. La dirección optó por comunicárselo en directo, algo que no le sentó nada bien. Su reacción resultó sorprendente, ya que lejos de derrumbarse optó por atacar a la productora y al espacio.
"Estáis haciendo el peor verano de la historia" o "cuando la gente hace zapping no seré yo el culpable de todo" fueron algunas de las perlas que soltó. No se mordió la lengua en ningún momento, abandonando el plató visiblemente molesto.
Durante una de las publicidades, Antonio Canales habló con Kiko Hernández y le hizo un balance de su paso por Sálvame. Diez Minutos se encarga de reproducir la entrevista que no tiene desperdicio. Aprovecha para saldar cuentas y para arremeter contra dos compañeros.
Admite que se lleva un grato recuerdo de la mayoría de colaboradores, entre ellos Paz, Jorge Javier, Gema, Chelo o María Patiño. Sin embargo, desvela que hay dos personas que jamás podrían ser sus amigas, "ni podría comer en una mesa ni hablar".
Uno de ellos es Miguel Frigenti. Cuenta que "no me ha gustado su forma de actuar". Recuerda como hace unos días se metió con las uñas de sus pies.
La otra compañera con la que no se llevó bien fue Laura Fa. La define como una persona a la "que le sale esa parte catalana que me duele muchas veces".
Pero, sin lugar a dudas, el gran enfado de Antonio Canales es con la dirección del programa. "Tengo pena de que haya sido la resolución así, de que no se haya hecho en privado y como yo merezco", dijo. Encajó bastante mal que se le avisara del despido en directo.
Pese a ello, tiene asumido que "estoy jugando a este tipo de programa y que soy carne de cañón. No me quedaba otra", explica. En su despedida se mostró muy valiente, dando su punto de vista sobre el futuro del programa.
"He intentado estar a la altura y defenderme un poco como gato panza arriba". Admite que quizás fue "un poquito menos crítico conmigo que con el programa, pero también hay que comprender mi momento".
La nueva vida de Antonio Canales en la televisión
Antonio Canales asegura que le gustaría labrarse una carrera en la televisión, con un "espacio" propio para conocerla más en profundidad. Se ha quedado con las ganas de "estar un poco más de tiempo para poder seguir aprendiendo".
En cualquier caso, Canales le ha adelantado a Kiko que continuará en Telecinco. Estará como colaborador en el programa de Ana Rosa, algo que "me hace mucha ilusión", cuenta.
En su despedida de Sálvame trato de mantenerse firme. "Quizás otra persona que no sabe tener la frialdad que yo tengo, se pone a llorar como un niño, pero no era el momento". Quizás ese fue el objetivo de la dirección del programa cuando decidió despedirlo en directo.
Buscar el llanto y el mosqueo del artista, algo que no consiguieron como se pudo comprobar este miércoles.
Antonio Canales quiso tomarse las cosas con calma durante esos instantes. Era consciente de que su madre y su hija le estaban viendo y no quería que sufrieran. Ahora solo piensa en "tranquilizarse y pagar página" lo antes posible.
Una vez pasado el tiempo se permite realizar un balance de su paso por el programa. Asegura que hubiera cambiado unas cuantas cosas de su actuación. "No estaría tan callado, no estaría muchas ausente como he estado".
Reconoce que "quizás me he acomodado y he pensado que iba a estar para siempre o por un tiempo largo, y no ha sido así". Agradece la ayuda de algunos compañeros. "Cada uno, a vuestra manera, me habéis intentado sacar las palabras", añade.