Rocío Carrasco estrenó hace unas horas la segunda temporada de su docuserie. A lo largo de varias entregas tiene previsto desvelar ciertos detalles familiares que buscarían desprestigiar tanto a sus hermanos como a los Mohedano. Sin embargo, debe medir perfectamente cada movimiento que realice si no quiere acabar en los tribunales.
Hace unos días destapaba la presencia de un testamento secreto, que era previo al oficial que finalmente se leyó. Se desconoce el contenido del mismo, pero se especula con que Gloria y Amador hubieran salido más perjudicados con el reparto de la herencia.
La lectura de dicho documento por parte de Rocío "ya no sirve para nada", advertía hace unos días Federico Jiménez Losantos en su programa. Lo considera algo "íntimo de su madre", que le llevaría a "incurrir en un delito de estafa procesal", añadió el locutor en el espacio.
Cuenta que "es un delito, por eso creo que no lo va a leer", subrayaba. En el caso de que decidiera seguir adelante con ello, tendría que enfrentarse a un serio problema legal. Sobre todo porque ya había señalado ante un juez que no existía ningún documento cuando así se lo demandó Gloria Camila.
Todo puede tratarse de un simple cebo o de una estrategia por parte de la productora para ganar audiencia. El citado testamento carece de validez y además podría acarrearle un contratiempo con la justicia.
Desde hace meses se viene especulando con la aparición de una serie de manuscritos y diarios escritos por la artista antes de fallecer. Su hija dejó entrever en todo momento que de mostrarlos conseguiría dejar en muy mal lugar a Ortega Cano y a los Mohedano.
Antes de que Rocío Carrasco hiciera públicos dichos documentos, su hermana decidió recurrir a la justicia para que no vieran la luz. El comunicador explicó que Rociíto "va en dos ocasiones a la juez y le dice que no va a declarar ni a entregar nada". En dependencias judiciales le explican que la "intimidad no es un bien tangible y que afecta a la intimidad de su hermana".
Una vez que le advierten de las consecuencias "dice que no encontró nada. Al no haber nada, Gloria Camila no puede recurrir y tiene que esperar a la emisión de la serie", subraya Jiménez Losantos.
Lejos de asustarse, la mujer de Fidel Albiac decide atacar de nuevo ahora. Y lo hace destapando la aparición de un presunto testamento "dentro de un buró".
El comunicador tiene claro que "si lee una línea de ese documento, va directa a un juzgado. Dijo a la justicia que no lo tenía y ahora resulta que lo tenía. Querellón que gana seguro", en referencia a su hermana.
Rocío Carrasco tiene que medir sus palabras
Rocío Carrasco posiblemente no contase con este contratiempo y tenga que medir mucho mejor el siguiente paso a dar. El periodista de Esradio explicó que "el testamento es algo íntimo de su madre, que en paz descanse".
Defendía el papel de Gloria Camila, que "es tan hija como la otra. Tiene derecho a ver lo que se va a publicar y que puede afectar a la intimidad" de la Jurado. Pero también podría salpicar de alguna manera a Ortega Cano, de ahí ese especial interés en conocer el contenido.
En cualquier caso, le insiste en que "la intimidad no se hereda. Pero es un derecho natural y ella tiene el mismo derecho que Rociíto a saber que ha encontrado".
Rocío está dispuesta a cargar contra su familia. Eso sí, seguramente lo haga debidamente asesorada para no ganarse una querella.