Leonor y toda la Familia Real permanecen muy atentos a las últimas noticias que circulan sobre el rey Juan Carlos. El exilio en Abu Dabi se le está haciendo excesivamente largo y ya cuenta los días para volver a casa.
La fiscalía suiza decidió archivar la investigación por una donación de 100 millones de dólares que ocultó por medio de una fundación helvética. Eso le abre las puertas para regresar a España, y su intención inicial era hacerlo estas navidades.
Al menos era lo que quería el abuelo de Leonor. Disfrutar de las fiestas junto a sus familiares y amigos. Pero en Zarzuela no es bien recibido.
Temen que una reaparición del emérito en estos momentos pueda manchar la imagen de la institución. Y más en la actualidad, cuando hay abierto un frente contra la monarquía por parte de algunos ministros y miembros del Gobierno.
Existe el temor de que el retorno de Juan Carlos eclipse el discurso de Nochebuena del rey. Como suele ser habitual en él desde hace tiempo, procura marcar distancias con su padre, sobre todo a raíz de los escándalos protagonizados.
Desde Zarzuela se le ha reiterado la necesidad de que aplace su regreso a Madrid. Al menos hasta que pasen las navidades.
Si por él fuera volvería a su casa en cuestión de horas, pero se ha encontrado con una fuerte oposición. Ni Letizia ni Felipe creen conveniente que les favorezca su reaparición.
Algunas fuentes, como recoge El Español, aseguran que el emérito habría aceptado esa petición de retrasar su vuelta. Pero a cambio solicitó poder estar en España el 5 de enero. Ese día cumple 84 años y lo único que desearía es verse acompañado por los suyos en una fecha tan especial.
Su intención es reunirse con los miembros de la Familia Real más cercanos a él. Entre los que se encuentran las infantas Elena y Cristina.
Más complicado lo tendrá para coincidir con Leonor y su hermana. Los reyes evitarán por todos los medios ese encuentro.
Letizia y Felipe no quieren que haya una fotografía con Juan Carlos. Sería una manera de desprestigiar la imagen de la princesa y de la Corona.
También tiene intención de verse con Sofía, con la que mantiene un trato muy cordial, pese al evidente distanciamiento que existe entre ellos. Y más tras conocerse sus romances con otras mujeres en los últimos tiempos.
Hay dudas sobre la fecha escogida para volver a casa, pero también sobre el lugar en el que fijará su residencia. En Zarzuela no hay intención de acogerle. La opción que se baraja es que lo haga en un inmueble del Patrimonio Nacional o en la finca de algún empresario amigo.
Leonor, pendiente del abuelo
Leonor también está preocupada por el estado de salud de su abuelo. A sus 84 años ha sufrido algunos achaques típicos de la edad. Unas imágenes publicadas el pasado enero, en donde caminaba con cierta dificultad, hicieron saltar todas las alarmas.
Se temió que eso pudiera acelerar su retorno a casa. Algunos allegados tampoco ven con buenos ojos que pase los últimos días de su vida lejos de los suyos. Desde el Gobierno, han sido muy claros al respecto.
Dejarán cualquier decisión que se tome en manos de la Casa Real. Respetarán el acuerdo que más beneficie a los intereses del actual rey.
De cumplirse las intenciones del emérito de estar en España el día 5 de enero, lo más probable es que no coincida con su nieta. Leonor comienza las clases en el internado de Gales en la víspera de Reyes.
Por lo tanto, el ansiado reencuentro no se produciría, o en el mejor de los casos podría hacerse en un aeropuerto.