Letizia Ortiz ha sido la nueva víctima de Peyu (Lluís Jutglar) y Jair Domínguez, dos cómicos que utilizan a personajes públicos para sus discursos. Según los expertos, en esta ocasión han traspasado todos los límites, de ahí que hayan censurado su último trabajo. Utilizan a la reina y a su hija Leonor para hacer reír al público, pero emplean un tono poco recomendado.
Letizia Ortiz asumió que estaría en boca de todos desde el primer momento que puso un pie en Zarzuela. Sin embargo, jamás hubiera pensado que usarían su nombre para hacer bromas que dañaran su honor. Peyu y Jair Domínguez, presentadores de Bricoheroes, un programa de humor, han demostrado no tenerle miedo a nada ni a nadie.
La reina se ha convertido en la protagonista del último sketch de los humoristas anteriores, quienes hablan de ella en un contexto “demasiado sexual”. Las autoridades pertinentes han decidido vetar el episodio porque lo consideran “machismo de toda la vida”. No obstante, hay quienes consideran este atrevimiento un atentado contra la libertad de expresión.
Hasta los sectores más críticos con la monarquía asumen que Jair Domínguez y su compañero de programa se han excedido. Aunque consideran que prohibirles hablar en determinados términos es contraproducente, sobre todo en temas tan delicados. Ahora todo el mundo está deseando ver el vídeo donde los cómicos dicen: “Me haría gracia me la chup* Letizia”.
Letizia Ortiz, aterrada: “Puede considerarse pedófilo”
Vicent Sanchis, director de TV3, ha decidido censurar el último trabajo de Jair y Peyu, los artistas que han bromeado con la reina. Considera que, independientemente de su posición social, sus bromas interfieren en esferas demasiado íntimas. También juegan con la princesa Leonor, quien no deja de ser una niña menor de edad.
“La escena de Bricoheroes puede ser considerada machista e incluso pedófila”, explica el director después de los ataques que ha recibido. Le acusan de “querer ahorrarse problemas políticos” y de hacer mal su función al frente de TV3. Los seguidores de los humoristas han puesto en duda la profesionalidad de Vicent Sanchis, quien asegura que está siendo lo más parcial posible.
“En la escena no se habla de la monarquía, se habla de una mujer y de su hija menor de edad. Una televisión pública no puede cruzar esta línea”, declara intentando justificarse. Según los expertos en la institución, doña Letizia podría estar aterrada después de este suceso.
La mujer de Felipe VI tiene miedo de que sus hijas puedan ser víctimas de la presión social y mediática que sufre la Familia Real. El sketch que tanto revuelo está causando demuestra que Leonor y Sofía están peligrosamente expuestas. La reina siempre ha intentado protegerlas, pero está claro que sus tentáculos no llegan a todos los rincones.
Los presentadores de Bricoheores se defienden
Peyu y Jair Domínguez han usado sus redes sociales para manifestarse después del escándalo que ha generado su último número. Aseguran que no querían ofender a nadie, simplemente estaban debatiendo sobre una realidad que es evidente. Sus fans están de acuerdo con los argumentos que han utilizado, pero parecen ser los únicos que no identifican el problema.
Los artistas defienden que únicamente estaban representando “una fantasía de un millonario”. “Alguien la puede encontrar machista, pero es que desgraciadamente los millonarios que conocemos no suelen ser gente de valores respetables. Piensan que el verdadero fallo es haber utilizado a la monarquía, de ahí que aludan a la reducida “libertad de expresión”.
Vicent Sanchis se mantiene firme y no admite dar pábulo a determinadas expresiones que pueden resultar ofensivas para un colectivo vulnerable. A pesar de que ha recibido muchas críticas, los expertos en televisión consideran que se está comportando correctamente.
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