Laura Matamoros espera con ganas la llegada de su segundo hijo junto a Benji Aparicio. La influencer está en su mejor momento tanto profesional como personal, aunque no gane para disgustos, como el de hace unas semanas con Matías.
Su relación con el chef va viento en popa y parece que esta tercera oportunidad que se dan es la definitiva. De hecho, hace poco decidieron cambiar de casa para dejar todo lo negativo atrás y comenzar una nueva vida en familia.
Laura entremezcla la mudanza con su avanzado estado de gestación preparando todo para el nacimiento del bebé. Unos días ajetreados que han hecho que su embarazo le haya acarreado más de un problema.
Laura Matamoros confiesa un nuevo revés en su salud
Hasta el último momento Laura Matamoros continúa inmersa en su trabajo como influencer. La hija de Kiko Matamoros no quiere que su embarazo se interponga en sus compromisos profesionales, y está apurando al máximo.
Sin embargo, no puede evitar que su avanzado estado comience a pasarle factura. Si en los primeros meses ya confesó estar pasándolo francamente mal, ahora un nuevo revés sacude su tranquilidad a pocas semanas de dar a luz.
La propia Laura explicaba a sus más de 900.000 seguidores los problemas que sufre en la recta final. Cierto que no suponen un riesgo para el bebé, pero no por ello deben tomarse a la ligera, ya que no lo lleva nada bien.
"Reventada no, lo siguiente, que viva el insomnio", comenzaba diciendo la influencer. "Llevo desde las 4 de la mañana despierta, pero bueno esto es lo que me queda de aquí al final del embarazo", explicaba.
Parece que el bebé le está poniendo las cosas complicadas y confía en volver a recuperar el sueño cuando el pequeño nazca. "Espero empezar a dormir bien otra vez porque son rachas y lo llevo fatal", confesaba en sus stories.
Laura Matamoros y su rutina para paliar las molestias del embarazo
Como buena influencer, Laura comparte con sus fans la evolución de su embarazo así como las rutinas que realiza para hacerlo más llevadero. La recta final siempre es la más agobiante, pues se juntan los nervios con la pesadez de los últimos días.
De ahí que la hermana de Diego Matamoros se deje mimar con toda clase de masajes que le ayuden a rebajar la tensión. Y si además reducen la hinchazón de las piernas, mucho mejor. "Estaba deseando que llegara este momento, cada día me siento peor y con más retención, gracias a estos masajes después me siento súper bien", relataba.
De hecho, Laura compartía una foto donde mostraba cómo su mano estaba hinchada como consecuencia del embarazo.
Laura Matamoros ya no puede más
Si algo ha dejado Laura claro, es que este segundo embarazo nada tiene que ver con el que pasó cuando se quedó embarazada de Matías. Durante estos nueve meses, las molestias no le han dejado disfrutar al cien por cien del momento y solo desea que acabe ya.
Hace unas semanas su desaparición de las redes sociales desataron las alarmas. La influencer no publicó nada y el silencio imperaba en su cuenta. Fueron los constantes mensajes de sus fans preocupados los que la llevaron a confesar que no se encontraba bien y que tuvo que ser ingresada.
"Llevo unos días desconectada, es como que está pudiendo conmigo totalmente estos últimos días el embarazo", reconocía. Además, también tuvo que acudir de urgencias con su hijo Matías que comenzó a sentirse mal en plena noche.
Un estrés de vida que no tenía cuando se convirtió en madre primeriza y que ahora le complica la recta final de su segundo embarazo.
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