Carme Chaparro es uno de los rostros más reconocidos de Mediaset. Durante los últimos años han confiado en ella la presentación de informativos y de distintos programas de la cadena.
Hace más de 20 años que aterrizó en Telecinco, y desde entonces se ha convertido en una de las presentadoras de referencia.
Tiene el honor de haber cubierto grandes eventos como la boda de los reyes o los atentados del 11-M. Más recientemente se la recordará por su paso por las noticias de Cuatro y por el espacio Cuatro al día.
Pero Carme Chaparro también es conocida por su faceta como escritora. En más de una ocasión se le ha visto en distintos formatos de Mediaset promocionando sus obras, pero también hablando sobre su vida privada.
Hace unos años contaba en una entrevista que padece un problema de salud. Se trata de una sordera importante en el oído derecho, que le afecta en el día a día, sobre todo en el trabajo. En ocasiones es incapaz de entender lo que le dicen por el pinganillo o de escuchar una conversación por teléfono.
Lo peor que lleva es el pitido constante que tiene instalado en el oído, y que, en ocasiones, resulta insoportable. Eso le impide escuchar el silencio por completo. Pese a que lleva muchos años así, nunca acaba por acostumbrarse.
Procura que este tipo de dolencias no afecten a su carrera profesional. Ella es capaz de plantarle cara a esto y a muchas más cosas. Hace apenas unas semanas tuvo una grave lesión de rodilla que no le impidió acudir a su programa.
Fue Miguel Lago el que anunciaría en directo el problema que sufría la periodista. Trató de llevarlo con tanta discreción que ni su madre estaba al tanto de ello.
Carmen Chaparro sufría una rotura del menisco interno, una lesión complicada de operar. Tras valorarlo con los médicos decidió iniciar un tratamiento de recuperación que no le impide llevar una vida normal. Así lo plasma ella con regularidad en las redes sociales.
Profesionalmente, se encuentra ante uno de los mejores momentos de su carrera. De eso no hay duda. Sin embargo, lamenta que las cosas no le vayan igual de bien en lo personal, sobre todo en cuestiones de salud.
Hace unos días compartía con sus seguidores en Instagram una foto de ella en un centro médico. Se encontraba ataviada con una bata de hospital, doble mascarilla, gorro desechable y gafas de protección. En un primer momento sus fans se pusieron en lo peor.
Después de la última ola de coronavirus que ha golpeado con fuerza a un número importante de personas, todo indicaba que también se había contagiado. Pero no era así en realidad.
Carme Chaparro, muy pendiente de su padre en todo momento
En la foto que Carmen Chaparro subió a las redes sociales aparece con el rostro serio. Aclara que no es ella la infectada por el virus. Se trata de su padre.
La periodista toma todas las precauciones posibles para visitarle con las mayores garantías. No quiere seguir el mismo camino que él. Termina su mensaje recordando lo "duro" que es esto.
Este tipo de imágenes vuelven a retrocedernos en el tiempo, en concreto a la primavera de 2020. En aquella época se produjeron un importante número de casos en todo el país. Gestos como el de la presentadora ayudan a concienciar a la gente sobre la necesidad de cuidarse y de poner medidas para frenar el contagio.
Carmen Chaparro ha empezado el año con mal pie, pero confía en que todo esto tenga un final feliz.