Gema Aldón se quedaba atónita ante el que fue el momentazo del fin de semana. Su madre regresaba al plató de Ya es verano para continuar estirando el chicle de su crisis matrimonial. Son ya muchos meses hablando sobre el tema y este empieza a provocar hartazgo entre los espectadores.
Ana María no aporta nada nuevo en su testimonio y tampoco lo hace Ortega empeñado en seguir negando lo evidente. De ahí que la llamada telefónica en pleno directo el pasado fin de semana provocara reacciones. Era la primera vez que se veía a la pareja juntos hablar ante los medios, pero esto podría responder a un plan.
Gema Aldón descubre que todo estaba preparado
Gema Aldón ha decidido hacer caso a su madre y se ha apartado de los medios. La hija de Ana María Aldón jugó un papel fundamental en la crisis matrimonial, aportando sus vivencias en la casa de Ortega Cano.
Su testimonio dio mucho de qué hablar y dejó en evidencia el trato poco agradable que recibía su madre en el hogar de la pareja. Ahora, apartada por la diseñadora, es consciente de la manera de proceder de esta.
Aunque no ha habido exclusiva anunciando la separación como se esperaba, la de Sanlúcar ha hecho su particular agosto. Sus apariciones televisivas han sido casi semanales, pero estas han perdido fuelle. Sobre todo porque no aporta nada nuevo y continúa aferrándose a una historia que está más acabada que nunca.
Necesita reenganchar a la audiencia y es ahí donde su todavía marido resulta fundamental. Contra todo pronóstico, coincidiendo que su mujer estaba en el plató de Ya es verano, Ortega entró por teléfono sorprendiendo a los presentes.
No así a su mujer que recibía la llamada con su particular rostro firme y sin pestañear. "Antes que nada disculparme por entrar otra vez en la televisión, para mí tampoco es de mi gusto tener que hablar continuamente", comenzó diciendo el exdiestro.
No son pocos los que piensan que todo en la vida de Ana María y Ortega está pactado para sacar dinero. Una teoría que cobró más fuerza al escuchar al representante de la diseñadora afirmar que "primero debíamos crear al personaje". "¿Me estás diciendo que todo es ficción?", espetó María Patiño al escuchar esas palabras, mientras el mánager echaba marcha atrás.
Gema Aldón atónita ante lo ocurrido en directo
Gema Aldón aseguró ser consciente de lo que realmente le estaba ocurriendo a su madre en el domicilio familiar. Ella misma contó no tener ni voz ni voto en su propia casa lo que se sumó a una serie de circunstancias que terminaron por dinamitar su autoestima.
Con la llamada de Ortega quedó patente que la crisis matrimonial era un hecho y que existe una "falta de comunicación" entre los dos. "No merece la pena que en una cosa como esta estemos cada uno por un lado, si ella dice que todo está muy bien, todo no está tan bien", explicó.
"La cosa es que no hay un diálogo entre ella y yo, no sé si es mi culpa o su culpa", continuó exponiendo. "Me gustaría que pegáramos un giro todos de 180 grados, creo que la cosa se está saliendo de madre, debemos ser una familia", opinó.
Algo con lo que se mostró de acuerdo Ana María pensando en el bienestar del hijo que tienen en común. "Tiene que haber lo que no hay, que el niño vea una normalidad que dentro de lo que está ocurriendo, que es innegable e indiscutible", aportó la diseñadora.
"Como bien dice Ana, tenemos una joya, que no es un niño normal, sino especial y muy inteligente", señaló Ortega. "Tenemos que ponernos las pilas y si tenemos algo personal o interior, pues sacarlo en palabras y en diálogo", sentenció.
Veremos en qué queda toda esta declaración de intenciones y si, realmente, estamos ante el montaje del verano.