Uno de los últimos trabajos de Verónica Forqué en televisión fue en La que se avecina. Interpretaba a una despistada alcaldesa que sentía atracción por Enrique Pastor, su concejal y vecino de la comunidad más popular de España.
Estuvo unas pocas semanas trabajando en la producción de Mediaset, pero eso no le impidió ganarse el cariño de los compañeros. Muchos de ellos se acordaron de la actriz en redes sociales, pero otros optaron por darle la última despedida en persona.
Es el caso de Isabel Ordaz, uno de los personajes más reconocidos de La que se avecina. La intérprete que da vida a Araceli Madariaga, también conocida como La Hierbas, reapareció en el velatorio de Verónica Forqué muy cambiada.
Para algunos estaba prácticamente irreconocible, con un aspecto muy renovado. Mostraba un semblante serio, con los ojos vidriosos. Todas las miradas se centraron en ella, ya que no mostraba un look muy distinto al que estamos habituados.
Lejos de las cámaras, Ordaz parece otra mujer. Es lo que tiene vincular a una persona con un personaje, que casi siempre puede llevar a equívoco.
Se le pudo ver muy triste en la despedida de Verónica. Habían compartido unas cuantas escenas juntas en la serie de Mediaset. Fueron apenas siete semanas las que estuvo en la producción, pero las suficientes para ganarse la admiración del reparto.
Isabel llegó a la capilla ardiente con un jersey blanco y un abrigo negro. Mostraba un aspecto más delgado y un pelo más corto y aclarado. Sin lugar a dudas, este nuevo aspecto le favorecía.
Sin embargo, el paso del tiempo empieza a ser palpable. La pandemia ha dejado muchas secuelas en todo el mundo, pero en algunas personas mucho más.
Verónica Forqué dejó huella entre sus compañeros
Es posible que se aprecie un cierto envejecimiento en la que fuera compañera de Verónica Forqué. Y es algo lógico, sobre todo si tomamos como referencia los capítulos de La que se avecina.
En Factoría de Ficción emiten repetidos a diario un buen número de capítulos, en donde la mayoría de ellos ya tienen un tiempo. Eso puede llevarnos a una cierta confusión. De ahí que pueda resultar sorprendente los cambios físicos de los actores.
Durante los últimos años, además de su trabajo en esta producción, también ha protagonizado varias obras de teatro. Eso le ha llevado a recorrer gran parte del territorio nacional.
Alguno podría pensar que se trata de un cambio circunstancial, por un papel concreto o simplemente que se preparó así para despedir a su amiga. Pero no fue así. Nos remitimos a su cuenta de Instagram para evidenciar que esa transformación va en serio.
Ya lleva un tiempo con ese look. Desde la pandemia parece una mujer totalmente diferente.
En una de sus últimas publicaciones en redes sociales promociona su último trabajo: Con el beso. Se trataba de una función en Sevilla el pasado 10 de diciembre en el Auditorio Rafael de León.
En cualquier caso, tampoco hay que pasar por alto que Isabel Ordaz tiene 64 años. Pese a ello, todavía se mantiene muy joven y activa, y nadie diría que está al borde de la edad de jubilación. Pero ya se sabe que los actores no tienen la costumbre de retirarse de manera voluntaria.
Siempre les gusta hacerlo en activo, haciendo lo que más les gusta. Los papeles y propuestas en el teatro nunca le han faltado.
Algo que no puede decir la recientemente fallecida Verónica Forqué. En los últimos años apenas había recibido propuestas para trabajar, lo que acabaría afectando aún más a su estado de salud.