Belén Esteban empieza a ver la luz al final del túnel después de tres meses pasando un verdadero calvario por aquella caída que la dejó en silla de ruedas para su desgracia.
A pesar de este revés en su vida, Belén Esteban se operó satisfactoriamente de la rotura de tibia y peroné. Y se puso en manos de varios fisioterapeutas para que la recuperación fuese por el camino correcto.
Así las cosas, ella sabe que ya está en la recta final de ese duro trance que ha atravesado en compañía de su marido Miguel. Alguien que ha logrado que no se hundiera durante estos meses en los que apenas se ha podido mover.
Belén Esteban entona el 'mea culpa' tras lo sucedido
Este miércoles, Belén Esteban volvía de nuevo a protagonizar una portada de una conocida revista del corazón. Y es que la de Paracuellos ha dado la primera entrevista exclusiva en Semana tras todo lo sucedido. Esta ha hablado de todo lo que ha sufrido durante este tiempo por esta desafortunada caída en el plató de Sálvame.
"Me han puesto 20 clavos y dos placas de 4,5 centímetros y un total de 55 puntos", desvelaba la tertuliana, que aseguró que su pie se quedó reventado tras la caída. “Han sido los peores meses de mi vida, de verdad. Nadie se imagina lo que he pasado”, confiesa.
Lo cierto es que las primeras semanas tras el accidente fueron las más duras para Belén. No encontraba consuelo a lo sucedido y se encerró en sí misma. “Lo he pasado fatal. Me bloqueé, no quería ver a nadie, ni comer, ni hablar… Me hundí”, ha desvelado.
La colaboradora confiesa que está yendo al psicólogo
Que la televisiva lo ha pasado mal tras su caída es obvio. Y lo cierto es que los que estaban con ella en la entrevista que ha concedido esta semana hablan de una mujer muy emocionada.
Así las cosas, durante la entrevista, realizada por el director de la publicación, han sido varias las ocasiones en las que la madrileña se ha echado a llorar. E incluso tuvo que interrumpirse en un momento dado para que la 'princesa del pueblo' tomase aire.
“He estado peor de la cabeza que de la pierna”, explica, y confiesa que está yendo al psicólogo. “Así no podía seguir viviendo”, expone.
Además, Belén entona el 'mea culpa' en cierta manera. Admitiendo que lo ha pasado realmente mal, apunta que ha sido injusta con la gente que ha estado con ella en todo momento.
No esconde los problemas del matrimonio tras el accidente
“Estaba cabreada con el mundo, con mi familia, con mis amigos, con mis compañeros, con mis jefes… conmigo misma”, admite.
Por encima del resto, la madrileña pone el foco en alguien que ha sufrido su ira. Y no es otro que Miguel Marcos, su marido. “Se merece el cielo”, ha confesado.
La colaboradora de Sálvame sabe que su esposo es el mayor pilar de su vida, más allá del amor que siente por su hija Andrea.
Ha querido dedicarle unas palabras, consciente de que ha tenido que aguantar los reproches de la de Paracuellos. “Me he portado mal con él. Mi cabeza me ha traicionado y él ha tenido una paciencia infinita. Me ha demostrado que me quiere con locura”.
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Lo cierto es que Belén casi ya ha vuelto a la vida normal, aunque todavía necesita las muletas para desplazarse. Ayer mismo, la madrileña disfrutaba del concierto de Rosalía en el Wizink Center de Madrid y se lo pasaba en grande en compañía de su marido y de alguna amiga televisiva.