El fútbol y el rugby balear lloran la muerte de Javier Rodríguez Torres, un deportista muy conocido en las islas que falleció la pasada madrugada. Ha muerto tras una larga lucha contra el cáncer, que le obligó a retirarse de los terrenos de juego. La noticia ha causado un gran pesar en el deporte mallorquín.
Javier era originario de Valladolid, pero hace tiempo que aterrizó en Mallorca por motivos laborales. Allí siguió cultivando sus dos grandes aficiones, el fútbol y el rugby, y al retirarse siguió vinculado al deporte a través del arbitraje. En su paso por varios equipos dejó muchos amigos que hoy lloran desconsolados su muerte.
En Valladolid defendió los colores del club de rugby El Salvador, y luego, ya en Mallorca, militó en el club de rugby Falcons Alaró. Tiempo después dejó el rugby y se pasó al fútbol, formando parte del Margaritense en la Tercera División. Sus equipos han manifestado el profundo dolor por la muerte del deportista.
Conocido en todos lados como ‘Pucela’, Javier se retiró del rugby y el deporte pero siguió en el deporte como árbitro. Durante diez años dirigió partidos de fútbol base y amateur, y durante cinco temporadas fue árbitro de la Tercera División balear. Su tardía entrada en el arbitraje y la precoz enfermedad le impidió llegar más arriba.
‘Pucela’ era una persona muy querida, tanto en el mundo del rugby y el fútbol, como en el arbitraje. El Comité Balear de Árbitros (Cafib) ha emitido un comunicado lamentando la muerte de su compañero Javier Rodríguez Torres: “El Presidente solicita que en los partidos del fin de semana se guarde un minuto de silencio en su recuerdo”.
En su última etapa en activo dirigió partidos del fútbol base y se implicó en el deporte balear y el mundo del arbitraje con gran ilusión y compromiso. Se retiró de los terrenos de juego hace un año y medio, cuando se le reprodujo el tumor del que había sido operado hace 12 años. En todo este tiempo ha estado luchando de forma valiente contra el cáncer.
Minuto de silencio en su memoria
Finalmente no ha podido ser, y ‘Pucela’ ha muerto de madrugada rodeado por sus seres queridos. Este fin de semana, tal y como proponía la Cafib, se guardará un minuto de silencio en su recuerdo en todos los campos del fútbol base. Es el homenaje a una persona que dejó muchas amistades en los lugares por donde pasó.
Es el segundo mazazo en poco tiempo para el deporte balear, ya que hace apenas unas semanas murió un joven jugador del fútbol base. Se trata de Joan Francesc Carbonell, un chico de 17 años mortalmente atropellado en Consell (Mallorca), el pasado 10 de octubre.
La trágica muerte de Joan Francesc conmocionó a la pequeña localidad de Binissalem, de donde era natural. El joven había jugado en las filas del CD Binissalem, un modesto equipo de la Tercera División Balear. El club se vio muy afectado por el suceso, y le dedicaron un sentido homenaje en su propio estadio.
Semana negra en el deporte español
El deporte español se encuentra de luto esta semana por la muerte de Iván y Cristian, dos jóvenes futbolistas fallecidos en accidente de trágico. Iván Górriz, de 19 años, jugaba en el Mare Nostrum de Puerto Sagunto (Valencia). Cristian Barroso, de 23 años, militaba en las filas del Obandina (Badajoz).
Iván acababa de ascender a la categoría sénior y estaba cumpliendo su sueño futbolístico. Un accidente en Valencia, la madrugada del pasado lunes, acabó con todas sus ilusiones. Según los expertos, tenía un gran potencial debido a sus características como futbolista.
En las últimas horas se ha conocido también la muerte de Cristian en un accidente ocurrido el pasado miércoles. Sucedió en la carretera extremeña que une Don Benito con Medellín, cuando chocaron frontalmente un coche y una furgoneta. Era un joven apasionado por el fútbol, y con el 10 a la espalda era todo un héroe en su equipo.