Anoche, Rocío Carrasco regresaba a la televisión. Y lo hacía trabajando como colaboradora del programa 'Lazos de sangre' de La 1, que presenta Boris Izaguirre.
Su estreno fue en una noche que giró en torno a la vida de la actriz y cantante Carmen Sevilla, una gran amiga de su familia y alguien muy especial para aquella. No obstante, a pesar de que el leitmotiv era dicha celebrity, lo cierto es que Rocío consiguió acaparar mucho la atención pues su regreso a la pequeña pantalla suscitó un gran interés.
En su vuelta al trabajo televisivo no dudó en tener varios recuerdos hacia su progenitora (Rocío Jurado), de la que llegó a admitir que no solo se acordaba de ella todos los días sino que también «me parezco en muchas cosas a mi madre, cada vez más. No en todo, la voz no la tengo».
Sin embargo, si había expectación por volver a verla era porque se esperaba que hablara de sus hijos, Rocío y David Flores, con los que no tiene relación desde hace años. Sin embargo, siguiendo su estela, Carrasco obvió hacer mención a ellos y eso es algo que seguro molestó a ambos jóvenes, que ya son mayores de edad.
No obstante, si hubo algo que aún les enfadó mucho más fue el hecho de que no dudó en hablar de la maternidad. En concreto, lo hizo defendiendo a Carmen Sevilla por intentar compaginar su vida profesional y su faceta de madre, no sin dificultades. Así, manifestó: «Si hoy le preguntan a cualquier madre trabajadora le contestaría esto, que le faltan horas para ver crecer a sus hijos».
Ese comentario seguro que no gustó nada a sus vástagos como a muchos internautas que no dudaron en destacar que hablara tan 'alegremente' de lo que supone ser madre y tener vástagos cuando ella lleva tiempo sin ver ni hablar con los suyos. Eso sí, los motivos de ese distanciamiento son otra cosa y quizás ella tenga sus razones, o no, para que la situación sea así.