Raquel Meroño se ha vuelto a enamorar. Desde que se separara de su marido en 2018 poco se sabía de su vida amorosa. Sin embargo, ahora ha sido fotografiada junto a un hombre en una actitud muy cariñosa.
Ha sido siempre muy discreta con sus relaciones. En las redes sociales no hay rastro de la persona que ha conseguido conquistarla. Pero la revista Semana se ocupa de dar todos los detalles sobre este misterioso hombre.
Raquel Meroño ha encontrado el amor de nuevo en una persona de su círculo de amistades. Lo más curioso de todo es que también es conocido de Santi Carbones, el exmarido de la actriz, con el que tuvo dos hijas. En las redes sociales hay una foto de ambos en una actitud muy cercana.
Lo más probable es que se conocieran desde hace tiempo. En cualquier caso, el acercamiento de la actriz con este chico es más bien reciente.
A los 46 años, ella inicia una nueva etapa en su vida, y lo hace con mucha ilusión y con ganas de recuperar la sonrisa.
Los últimos tres años han sido muy agitados para ella. Además de la ruptura sentimental, su paso por MasterChef también ha supuesto un gran ayuda para relanzar su carrera. En los fogones de este talent culinario demostró su destreza y espíritu competitivo, lo que le llevó a conseguir la victoria.
Le ha abierto muchas puertas después de un tiempo en el paro. Las ofertas para campañas y promociones han sido constantes, algo que ha sabido aprovechar a la perfección.
Una vez que ha conseguido una cierta estabilidad en lo laboral, su siguiente objetivo ha sido encontrar el amor. Y lo ha hecho al lado de Eduardo Zulueta Loinaz, de 41 años. Trabaja como gerente de distribución de Smartgroup Telecomunicaciones, una compañía que presta servicios tecnológicos.
La revista cuenta, además, que tiene cierta vinculación con el mundo del fútbol. Es amigo de varios jugadores de primer nivel, como es el caso de Sergio Ramos. Así lo confirman varias imágenes.
Raquel y Eduardo fueron pillados hace unos días en una zona próxima a su casa de Madrid. Fueron sorprendidos por los fotógrafos entre besos y abrazos.
Pese a ello, la actriz es consciente de que debe mantener una buena relación con su ex. Sobre todo por el bienestar de sus dos niñas, que son el motor de su vida. Había contraído matrimonio con Santi en 2011 en Bali, separando sus caminos en 2018.
Además de las hijas que tienen en común, también cuentan con una serie de negocios comunes que les impide acabar con su relación. Cuentan con un chiringuito en la playa de Los Lances, en Tarifa, que se hace llamar Carbones 13.
Raquel Meroño lleva una vida agitada
Raquel Meroño, como le ocurrió a miles de españoles, también fue víctima del coronavirus el pasado verano. Y eso que tenía la pauta completa de la vacuna.
Ella mismo lo comunicó a sus seguidores con un baile en las redes sociales. Pese a los malos momentos vividos en los últimos años, nunca se le quitó la sonrisa de la boca.
Su paso por las cocinas de MasterChef la han devuelto a la primera línea mediática. A partir de ahí empezó a recibir más llamadas para trabajar. Hace apenas tres semanas se incorporaba al reparto de la serie Servir y proteger de TVE.
En una entrevista concedida al ABC admitía que fue un "error por mi parte abandonar de manera tan tajante mi profesión". La había dejado aparcada "por una buena causa" como era el embarazo de sus gemelas, dándole prioridad en ese momento a la familia.
Se arrepiente de aquella decisión, que le obligó a abandonar ciertos "sueños". Confiesa que gracias al concurso de televisión y a este serie "los retomo de nuevo". Raquel señala que le "ofrece la oportunidad de seguir aprendiendo y reconectar con este mundillo".