Lolita Flores no ha empezado el año bien y es que su salud le está dando más de un susto.
Ha tenido que paralizar sus proyectos profesionales por un ataque de ciática e incluso por una bronquitis. Esto sin pasar por alto que, además, se le ha desprendido el humor vítreo del ojo, que le lleva a ver borroso.
Pero eso no es todo. Estos pasados días se contagiaba de COVID-19 y ha tenido que quedarse encerrada en casa. Ahora ya ha dado negativo, pero tiene distintas secuelas que está intentando superar poco a poco.
Lolita se contagia de coronavirus
El pasado 4 de febrero fue cuando la primogénita de Lola Flores dio a conocer a sus seguidores en redes que tenía el virus. Lo hizo subiendo a su Instagram una fotografía del test y esta la acompañó del siguiente texto: “Soy positiva. Llevo unos días así, los primeros malos y ahora voy mejorando, estoy en mi casa”.
“Me he ido salvando estos años, pero, al final, lo he pillado como cualquiera. El COVID no entiende de trabajos, razas, edades, apellidos, profesiones, ni de religiones ni de sexualidad. Es un bicho que está y seguirá”.
A esto añadió: “«Paciencia, me digo a mí misma». Paciencia, cuando se va la oscuridad llega la luz y la luz está llegando. Así que gracias, gracias y gracias”.
Afortunadamente, ya está libre del virus y lo ha comunicado a sus fans: “Ya por fin soy negativa. Ya se me fue el dichoso bicho tras 12 días. Gracias a todos por vuestros mensajes de ánimo, gracias de corazón”.
Una publicación esta que ha conseguido numerosos aplausos por parte de rostros conocidos como Ona Carbonell, Jordi Col, Cari Lapique o Mariola Orellana. Esto sin pasar por alto que sus incondicionales le han escrito comentarios, tales como: “Me alegro mucho”. Y también: “¡Qué alegría más grande! A seguir con ese arte”.
En esta misma línea están estos otros: “Gracias a Dios, cuídate mucho” o “Ahora a disfrutar y a seguir para adelante”.
Lolita Flores afronta las secuelas del contagio
La madre de Elena Furiase ya ha podido retomar su agenda profesional y esto ha hecho que sea entrevistada por Europa Press en plena calle. De esta manera es como ha confesado que su salud se ha visto perjudicada por el COVID. Y, del mismo modo, que ahora tiene que afrontar las consecuencias del mismo.
Exactamente, ha explicado: “Estoy bien, pero me ha dejado secuelas. Tengo cansancio, mocos y la voz tomada y algo más. Tengo una mala salud de hierro”.
Ha dejado claro que ahora tendrá que intentar recuperarse de lo sufrido al tiempo que hace frente a su problema de visión. Eso sí, para ello tiene el apoyo y el cariño constante de su familia con la que nada más recuperarse se ha reunido. En concreto, “sobre todo, con mi nieto”.
En este punto, ha reconocido que su hija está llevando muy bien su segundo embarazo. Y ha dado un dato más: “Todavía no sabemos lo que es, si niño o niña. Que venga bien y ya está, que es lo principal”.
Pasito a paso, pero con ganas es como la cantante ya ha vuelto al trabajo. Y, precisamente, esto le ha llevado a escribir en redes: “Mis pies andarán lo que tengan que andar. Ser felices y disfrutar del amor en cualquiera de sus variaciones”.
“En el amor de pareja, de hijos, de padres, de amigos, de familia y del amor a vivir. No sabemos qué tiempo nos queda aquí así que a pasarlo bien”.