Leonor ya se encuentra en Gales, donde cursará 2º de Bachillerato. Ha sido un verano de lo más intenso para ella, donde ha compaginado las vacaciones con los compromisos oficiales. Su papel dentro de la Casa Real cada vez es más relevante.
Observa con cierta envidia a su hermana Sofía, que aún tardará unos cuantos días en incorporarse a las aulas. No será hasta el 7 de septiembre cuando empiecen las clases en España. Por lo tanto, podrá alargar su descanso algo más de una semana.
Como ya ocurriera el año pasado, Leonor fue despedida por su familia en el aeropuerto de Madrid Barajas. Pero la princesa no viajó sola. Para sorpresa de su novio, le acompañaban dos hombres que se convertirán en su sombra durante la estancia en tierras galesas.
Se tratan de dos escoltas que se encargarán de seguir muy de cerca sus pasos, tanto en el centro como fuera de él. La vigilancia se alarga prácticamente durante las 24 horas, recoge El Nacional. Incluso llegan a dormir muy cerca de ella en una de las habitaciones del internado.
La hija de los reyes comienza el curso con mucho entusiasmo, ya que será el último año que estudie allí. Aunque la experiencia en el extranjero está resultando muy satisfactoria, echa mucho de menos lo que tiene en España. Durante las próximas semanas se ocupará de recibir a los nuevos alumnos y de enseñarles las aulas.
La joven "se marcha con muchas ganas de volver a ver a sus compañeros". Pero también es "consciente de que va a ser un curso en el que va a tener que trabajar muchísimo. Aunque ella es tan responsable y trabajadora que seguro que lo hará genial", aseguran personas próximas a ella en El Español.
Leonor aprendió mucho durante el primer año de estancia en Gales. Era la primera vez que salía de casa sola y supo adaptarse a la perfección al nuevo ambiente que se encontró. "El primer curso le ha ido genial, ha sacado buenas notas y está contenta", explican.
Eso sí, le cuesta mucho estar lejos de su familia, sobre todo de la infanta. "Pero está feliz con sus compañeros y amigos que ha hecho en el colegio, ha encajado de maravilla", indican.
El gran problema que se encontrará este año es que ya no tendrá cerca a su amigo especial. El chico moreno, de pelo rizado, con el que se le vio en Madrid la pasada Semana Santa. Es un año mayor que ella y continuará su formación en otro centro.
La que siente una mayor preocupación por ella es su madre. La reina considera que "los estudios son lo más importante para ella, pero sus obligaciones institucionales aumentan. Teme que sea demasiada carga para la princesa, porque su nivel de autoexigencia es muy alto", apuntan.
Leonor no descuida sus compromisos oficiales
Leonor está muy pendiente de sus estudios, sobre todo ahora que sabe que se le exigirá mucho más. Eso sí, tampoco puede descuidar su agenda institucional. Desde Zarzuela harán todo lo posible para que los compromisos oficiales le encajen en su calendario escolar.
Está garantizada su presencia en los próximos Premios Princesa de Asturias. Se celebrarán a finales de octubre coincidiendo con sus vacaciones de otoño. Es una cita a la que no puede faltar y sabe que todas las miradas estarán puestas sobre ella.
"Está deseando asistir a los actos que hay preparados. Está feliz con esa idea, es algo que su padre le ha enseñado, el deber que tiene", señalan.
Leonor ya tiene programado un calendario para que pueda compaginar las clases con sus obligaciones en España sin demasiado estrés. Por lo tanto, hasta dentro de un par de meses no se la volverá a ver por nuestro país.