Sara Carbonero e Iker Casillas estuvieron juntos en Oporto hace pocos días. Aquello provocó que se desataran los rumores de reconciliación entre una de las parejas más populares de la prensa del corazón. Se trató de un viaje relámpago que resultó un tanto sorprendente.
En ningún momento se conocieron los motivos que les llevaron de nuevo a la ciudad portuguesa en la que vivieron. Lo más probable es que tuvieran pendiente algún asunto burocrático.
En marzo del año pasado, la pareja formada por Casillas y Sara Carbonero decidía separarse después de once años de relación. Pese a la distancia que hubo entre ellos en algunos momentos, la cordialidad siempre imperó. De hecho, mantienen en la actualidad una buena relación, pensando sobre todo en el bienestar de los dos hijos que tienen en común.
Al que fuera portero del Real Madrid no se le ha conocido en este tiempo ninguna pareja. Sin embargo, Sara no le ha cerrado las puertas al amor. Desde el pasado verano está conociendo al cantante Kiki Morente.
Tratan de llevar su historia de amor con mucha discreción, lo más alejados posible de las cámaras. Siempre que pueden evitan a los reporteros gráficos y cuando acuden a cenar, lo hacen por separado.
Sin embargo, hay unas cuantas fotografías en actitud muy cariñosa que les delataría. La periodista y el artista han pasado las navidades por separado. Pero hace unos días se les pudo ver juntos en un restaurante de la capital.
Compartieron velada con dos amigos más, y durante la cena se dedicaron gestos y muestras de cariño. Todo apunta a que van muy en serio, pese a que ninguno de los dos ha querido confirmar la relación.
Esto supone un duro golpe para Iker Casillas, que nunca había perdido la esperanza de volver con su ex. Sigue enamorado de ella, y su intención era volver a estar juntos en algún momento.
Sara Carbonero le ha dado un giro radical a su vida. Está afincada de nuevo en Madrid, dedicada a la radio y muy centrada en sus negocios de moda junto con su amiga Isabel Jiménez. El poco tiempo que tiene libre lo dedica a estar con su chico.
En las imágenes de la última cena de la pareja se les pudo ver muy acaramelados. Sin embargo, la cara de Kiki cambió por completo cuando detectó la presencia de los paparazzi en la calle. Soltó la mano de Sara y empezó a comportarse de una manera más fría.
No quieren que se les inmortalice juntos. Son muy herméticos con su vida privada. Pero en esta ocasión no pudieron librarse de los objetivos de los fotógrafos.
Sara Carbonero se ocultae Iker se mantiene a la expectativa
Se desconocen los motivos por los que Sara Carbonero huye de los reporteros gráficos. Quizás se trate de una estrategia de la periodista pensando en sus hijos, pero también en el deportista. Sabe que son imágenes poco agradables para Iker Casillas, que todavía sentiría algo especial por ella.
Las últimas noticias publicadas por la revista Lecturas no han sido bien encajadas por el portero internacional. Sospechaba que todavía tenía alguna posibilidad de regresar junto a su chica. Pero las opciones son mínimas en estos instantes.
Al parecer, según desvelan personas de su entorno, no habría superado del todo la ruptura. Desde que anunciaran la separación, ninguno de los dos ha hablado en público sobre el tema.
Lo que más sorprende a todo el mundo es el cambio experimentado por Iker Casillas. Ha dejado de ser la persona tan sociable y con sentido del humor que había sido siempre.