Vista general del plató del programa de Ana Rosa Quintana con sus colaboradores

El famoso que vive alejado de la tele y que solo regresaría con una condición

Tiene una vida hecha fuera de los platós y lo único que le haría cambiar de opinión sería una importante cantidad de dinero

Hay un famoso que lleva muchos años apartado de la televisión. Tiene muchas cosas que decir, pero durante los últimos tiempos ha optado por guardar silencio. Sabe que se trata de una manera de aumentar su cotización en el mercado.

Se trata de Pepe El Marismeño, conocido sobre todo por su relación con Carmen Ordóñez. Con anterioridad había desarrollado una reconocida carrera musical, que le llevó a conseguir 42 premios con apenas 17 años.

Sin embargo, en muy poco se hizo famoso por su aparición en la prensa rosa. Tenía unos 20 años cuando comenzó a salir con una de las reinas del corazón en España. En más de una ocasión reconoció que con ella se bebió la vida y se adentró en el mundo de las adicciones.

Pese a todo esto, Pepe El Marismeño continuaba con su faceta musical y televisiva. Alternaba su agitada vida amorosa con la profesional, hasta que un día decidió pisar el freno. Fue en 2006 cuando empezó a colaborar con una organización en la ayuda contra la drogadicción.

En la actualidad dirige su propio centro en Sevilla, el Instituto Galeano. Lo definen como un terapeuta muy reconocido y admirado por los pacientes, consiguiendo importantes resultados. En este tiempo ha tenido la oportunidad de tratar a José Fernando, hijo de Ortega Cano.

Además de realizar esta labor social, Pepe El Marismeño no dejado de ofrecer conciertos y participar en ciertos espacios de Canal Sur. Entre ellos Menuda Noche o Yo soy del Sur. Siempre programas alejados del mundo rosa.

Ahora vive apartado de la televisión. Solo se plantea un regreso a cambio de una condición importante. Sería una cantidad de dinero elevada que no pudiese rechazar. 

Sabe que se trata de un personaje famoso que tiene mucho que contar, sobre todo del pasado. Una llamada de un programa del corazón le haría revolver viejas historias del pasado, que posiblemente no le interese destapar.

Sobre todo en estos momentos, en los que tiene una vida hecha fuera de los medios de comunicación.

Los proyectos de Pepe El Marismeño

Se encuentra volcado en su familia, en su esposa María José y en su hijo Joseto. Regenta también un chiringuito en Punta Umbría, donde se ofrecen comidas y cenas. En este establecimiento, además, hay lugar para la música.

Los fines de semana disponen de música en directo con grupos de flamenco. Hace un tiempo que se propuso crear una red de locales hosteleros en Huelva. "La gente pensaba que era una locura, pero no era así, todo estaba muy bien pensado", explicaba Pepe El Marismeño.

"Hemos montado en los cuatro puntos cardinales de Punta Umbría y en Huelva, llegando a tener a 120 trabajadores", señaló. Como se puede comprobar, la televisión ha quedado relegada a un segundo plano en su vida.

Está muy centrado en sus proyectos laborales en el sur, y hay pocas opciones de que pueda cambiar de opinión. En cualquier caso, la polémica le volvió a salpicar hace unos meses en las redes sociales.

La culpa la tiene un anuncio que publicó en Facebook. Muchos lo consideraron de sexista. En él solicitaba personal para uno de sus bares.

"Ahora a ver si puede ser. Necesitamos chicas para la temporada de verano en Uno Beach Club. Solo chicas por favor", escribió. 

Esta petición no sentó nada bien a mucha gente. Su muro de comentarios empezó a arder con críticas. "Chicas para ser reclamo de chicos, la España de toda la vida que no prospera", le contesta una persona.

Ante tanto revuelo tuvo que salir al paso. "He intentado contratar chicas para trabajar, puesto que ya tengo bastantes chicos y quiero compensar. Creo en la igualdad", se defendió Pepe El Marismeño.