Kiko Rivera ha aprovechado el séptimo aniversario de bodas con Irene Rosales para disfrutar de unos días de relax en familia. Ha hecho acopio del buen tiempo para viajar hasta la costa andaluza y aunque allí se ha mostrado muy feliz, su aspecto físico ha provocado la preocupación de sus seguidores.
El DJ está disfrutando de unos días de desconexión en familia
El hijo de Isabel Pantoja se ha desplazado hasta Chiclana de la Frontera, Cádiz, para celebrar los siete años de amor con su pareja y, de paso, desconectar de la polémica que surgió tras hacerse público el enfrentamiento con su madre y de las negociaciones que está llevando a cabo para vender su parte de Cantora.
Fue el pasado 24 de mayo cuando el matrimonio junto a sus dos hijas, Ana y Carlota, viajaron hasta la ciudad andaluza y allí permanecen disfrutando de unas pequeñas vacaciones en familia.
Se están alojando en el Hotel Riu Chiclana, un establecimiento que se encuentra a tan solo 200 metros de la playa de Barrosa.
Tras varios días en el municipio andaluz, el músico y su familia han aprovechado este martes, 1 de junio, las buenas temperaturas de la ciudad para disfrutar de un día de sol y playa.
El marido de Irene Rosales ha dejado a un lado todos los problemas a los que se ha enfrentado durante los últimos meses y ha pasado la mañana junto a sus allegados.
El DJ ha jugado a fútbol con su cuñado en la arena, se ha dado un baño en el mar y se lo ha pasado en grande junto a sus dos hijas.
El aspecto físico de Kiko Rivera hace saltar las alarmas
Kiko Rivera se ha mostrado completamente feliz en las imágenes que han logrado capturar los fotógrafos. Sin embargo, lo que más ha llamado la atención de estas fotografías no ha sido su estado de ánimo, ha sido su aspecto físico.
El hijo de Isabel Pantoja ha disfrutado de su día en la playa en bañador, sin camiseta, y de esta forma ha dejado ver su notable aumento de peso.
Él mismo ha confesado en más de una ocasión que cuando tiene «emociones muy fuertes» le ataca la ansiedad y le «da por comer» y esto es lo que le ha sucedido ahora.
El enfrentamiento con su madre y todos los problemas que han surgido a raíz de este asunto han provocado que trate de saciar su mal estar a través de la comida.
Así lo confirmó el primo de Anabel Pantoja en una de sus últimas entrevistas. El músico explicó que estaba comiendo mucha más comida de la habitual como consecuencia de lo mal que lo estaba pasando por la batalla que estaba disputando con su madre por la herencia de su difunto padre.
Su salud podría estar en peligro
No es la primera vez que Kiko Rivera coge algunos kilos, pero en esta ocasión ha habido un detalle de su figura que ha logrado preocupar a sus seguidores.
Sus imágenes en la playa han dejado ver que el DJ está acumulando demasiada grasa en la zona abdominal y este puede suponer un gran peligro para su salud.
Esto es así porque la grasa visceral produce hormonas del estrés, como el cortisol y sustancias inflamatorias llamadas citocinas que afectan a la producción de insulina del cuerpo.
Además, esta se extiende en el abdomen y se adhiere a los órganos, lo que puede llegar a provocar problemas muy graves como pueden ser una diabetes de tipo 2 o una enfermedad cardíaca.
Es precisamente el peligro que supone esto la razón por la que el marido de Irene Rosales debería ponerse en manos de un profesional lo antes posible e informarse sobre cómo puede ponerle solución.