Kiko Rivera no quiere saber nada de su madre. Por ese motivo, quiere deshacerse del último vínculo que la única a su familia: Cantora, finca que heredó de Paquirri. La revista 'Diez Minutos' aseguró que el DJ había tenido una reunión con un comprador, y que había cerrado un negocio estupendo.
Los días de Isabel Pantoja en su refugio campestre podrían estar contados. Desde que su reputación está en boca de todos, la cantante decidió aislarse en la casa que le dejó su marido. Aunque, Kiko Rivera ha puesto su parte en venta y, los nuevos inquilinos, podrían complicar la paz de la tonadillera.
Según la información que ha salido publicada, una empresa que se dedica a comprar herencias está interesada en el inmueble. En un primer momento, le han hecho una oferta al pequeño del alma. Pero, también están dispuestos a pujar por el porcentaje que le corresponde a la matriarca de los Pantoja.
El problema es que, doña Ana, abuela de Chabelita, vive con Isabel, y está muy enferma. Así que, la tonadillera no tiene pensado abandonar Cantora hasta para no perjudicar su estado de salud.
Kiko Hernández anunció en 'Sálvame' que la artista tenía en venta todas sus propiedades. Su sueño era mudarse al extranjero, y tenía pensado regalar la famosa finca a alguno de sus hijos. Aunque, los planes han cambiado, y ha sido Kiko Rivera quien ha movido ficha para vender la polémica propiedad.
El pequeño del alma está muy disgustado con su progenitora. En agosto de 2020 descubrió que había sido víctima de su ambición, y no dudó en vender su drama en la revista 'Lecturas'. Siguiendo sus declaraciones, le debe cinco millones de euros. Además, ha hecho una serie de operaciones en su nombre que podrían constituir un grave delito.
Irene Rosales es uno de los personajes más buscados desde que estalló la guerra Pantoja. Trabaja los fines de semana en Telecinco, con Emma García, en 'Viva la vida'. Desde allí, ha dado la última hora sobre su familia: Cantora sigue en venta. La tertuliana ha desmentido todas las informaciones que hacen alusión a dicha propiedad.
«No se ha vendido nada. Quiero desmentirlo»
La nuera de la Pantoja está muy preocupada. Tiene miedo que, las noticias que han salido publicadas, terminen perjudicando la última oportunidad que tiene su marido de solucionar sus problemas económicos. «No lo ha vendido. Solo ha tenido una reunión», anuncia.
La colaboradora ha explicado por qué la finca está a un precio tan bajo. El DJ necesita liquidez, y sobre el inmueble pesan ciertas cargas que impiden aumentar su valor. Así que, la última oferta que ha recibido es muy atractiva. Porque, además de deshacerse de la casa, el comprador tiene intención de hacer un museo para honrar la memoria de Paquirri.
«Hace mucho que no voy a Cantora, puede ser definitivo para el vínculo entre Kiko y lo que le dejó su padre. Si es lo que quiere, yo le apoyo. Sé el valor sentimental, pero las circunstancias han pasado así», declara la colaboradora en 'Viva la vida'.
Según ha contado, el hermano de Chabelita está atravesando por un momento bastante delicado: la ruptura con su madre, discusiones con su prima y problemas económicos. Así que, cerrar la venta de Cantora sería una noticia muy positiva para él. Pero, lamentablemente, el negocio todavía no ha terminado. «No se ha vendido nada. Quiero desmentirlo», insiste.
El DJ está deseando desprenderse de la herencia del torero para dejar atrás su turbulento pasado. «¿Sabes lo que pasa? Que, aunque hayamos visto a Kiko en plató, y fuerte, en casa no está fuerte. Está débil y le entran ganas de coger el teléfono. No deja de ser una madre que tiene un conflicto con su hijo, nunca va a haber un punto y final», explica Irene a Emma García.