Ana Soria, la estudiante de derecho más popular de la prensa rosa, ha tenido que renunciar a muchas cosas para ser novia de Enrique Ponce. El torero estaba casado con la empresaria Paloma Cuevas cuando se conocieron, por eso esta relación ha estado cargada de polémica desde el primer momento.
Algunos periodistas aseguran que los escándalos han pasado factura a la pareja, pero la realidad es bastante diferente.
Ana Soria ha apostado por su noviazgo con Enrique y no tiene en cuenta las opiniones de sus detractores, aunque la situación es bastante complicada. Quiere formalizar la situación y pasar por el altar cuanto antes, aunque el maestro parece no estar dispuesto a dar un paso tan importante.
Este sería el origen de la supuesta crisis, aunque fuentes cercanas aseguran que el conflicto tiene solución.
Enrique Ponce es uno de los mejores toreros del momento y renunció a su carrera profesional para disfrutar de su relación con Soria. Le recomendaron que se apartara del foco mediático porque estar continuamente en primera línea era contraproducente para su reputación. Los expertos aseguran que esta decisión le ha costado mucho dinero, pues lleva demasiado tiempo sin trabajar.
Enrique está enamorado y sería capaz de hacer cualquier cosa para formalizar su relación, el problema es que todavía no ha llegado el momento.
Ciertos periodistas aseguran que primero quiere recuperar las riendas de su trayectoria profesional y después se planteará si quiere casarse. También es importante saber qué piensa Cuevas de este evento, pues no quiere tener problemas con ella.
Ana Soria ha dejado de ser una chica anónima para convertirse en un rostro bastante perseguido, pero jamás ha sacado partido de su popularidad. Siempre ha sido bastante discreta y educada con los periodistas, a pesar de que no tiene experiencia en el negocio del corazón. No hay duda de que su boda sería un revuelo bastante cotizado, aunque todo hace pensar que falta un tiempo para comprobarlo.
Enrique Ponce ha perdido mucho dinero
Ana Soria vive en Almería, ciudad a la que se ha trasladado Enrique para empezar una nueva vida y disfrutar de su historia de amor. Varios testigos reconocen que tienen “peleas tontas”, aunque todos coinciden en que son problemas sin la mayor importancia.
Supuestamente, la situación se solucionaría si Enrique Ponce aceptara casarse con la estudiante, pero él tiene otro asunto en mente.
El exmarido de Paloma quiere retomar su carrera profesional, aunque no sabe cómo hacerlo porque la situación es complicada. Su intención es que su trayectoria no se vea salpicada por los escándalos de la prensa rosa y este propósito es bastante difícil. Según ha salido publicado, ha recibido una oferta para torear en México y ha estado a punto de aceptar, pero ha cambiado de opinión.
Ponce es un torero importante, pero su sueldo es muy diferente al que tenía antes, así que ahora no puede permitirse ciertos lujos. El portal JALEOS ha hablado con su entorno y una fuente de total solvencia asegura que el maestro perdería dinero si torea en México.
Actualmente, no puede permitirse ciertos caprichos porque lleva un tiempo sin recibir ingresos por parte del mundo del torero.
Ana Soria apostó por Enrique Ponce y tuvo problemas
Ana Soria, siguiendo la información del medio digital Informalia, quiere casarse con Enrique Ponce y es él quien no está convencido. Parece que la joven está bastante enamorada, pues ha tenido que atravesar situaciones complicadas para estar con el torero. Primero ha tenido que renunciar a su anonimato y después ha tenido que enfrentarse a rumores bastante controvertidos.
Soria está en el punto de mira y esta situación podría haberle alejado de ciertas personas que no quieren salir en los medios. Sin embargo, ella está enamorada y es capaz de hacer cualquier sacrificio para continuar al lado del torero. Habrá que esperar un tiempo para ver cuando se decide la pareja a pasar por el altar para formalizar la relación.