Esther López, de 35 años, fue vista por última vez hace 15 días en Traspinedo (Valladolid). Desde entonces sus familiares y amigos así como la Guardia Civil se encuentran haciendo todo lo posible para encontrarla. Por ahora, no se ha conseguido dar con ella, pero se ha procedido a la detención del principal sospechoso, Ramón 'El Manitas'.
Para los agentes encargados del caso este es un momento crucial. Lo es porque quedan menos de 24 horas para que acabe la prórroga establecida para mantener arrestado a aquel.
La búsqueda de Esther López se halla en el instante más decisivo
El caso de Esther López sigue sin resolverse. Mañana viernes, a las 09:00, es cuando se acaba la prórroga de 72 horas que un juez determinó para que Ramón siguiera detenido. Al cumplir el plazo, él quedará a disposición judicial y esto supondrá que sea ingresado en prisión de forma provisional o que sea puesto en libertad.
Precisamente pensando en esta última posibilidad, los agentes que llevan el caso de la desaparición de Esther López están trabajando a contrarreloj para encontrar más pistas. Sí, para dar con más indicios que evidencien la responsabilidad de 'El Manitas' en lo sucedido y, por supuesto, para encontrar a la joven.
Si no logran alcanzar el citado objetivo él podría quedar libre, lo que consideran que podría dificultar aún más la situación. Lo haría por varias razones: porque llegado el momento podría deshacerse de pruebas, porque sería más complejo demostrar su culpabilidad o porque significaría que no tienen ningún sospechoso. Vamos, porque la investigación sufriría un duro revés y la posibilidad de hallar a la chica se volvería más complicada.
Por este motivo, en estos momentos los GEAS, perros de las unidades cinológicas y numerosos efectivos siguen buscando a Esther López en los aledaños del río Duero. Y a estos se ha sumado también un helicóptero que está oteando tanto esta zona como otra de pinares que hay próxima.
Pero esto no es todo, pues también se ha llevado a cabo un registro exhaustivo de la vivienda de Ramón. Y es que en esta fue donde se perdió la señal del móvil de la vallisoletana. Al parecer, han conseguido sacar de allí un total de diez bolsas de indicios, que están siendo analizadas por Criminalística en Madrid.
De todos ellos depende ahora que López sea hallada y que surjan más pruebas que impidan que el sospechoso número uno sea puesto en libertad.
La familia de Esther López está rota y desesperanzada
Estas horas están siendo cruciales para la investigación sobre la desaparición de Esther López y también están siendo especialmente duras para la familia de la desaparecida. Su padre, Miguel, ha reconocido que está desesperanzado: “Tengo la esperanza de que aparezca mi hija, pero de que aparezca viva no tengo ninguna. Y así estamos en casa viviendo, esperando noticias, pero a mí no me llegan”.
De la misma manera, al ser preguntado por el hecho de que Ramón se ha negado a declarar, ha sido muy claro. Sus palabras han sido: “Me han dicho que puede ser porque así no tiene que declarar ante el juez, pero no lo sé. Yo creo que si no quiere declarar es porque buena señal no puede ser”.
Asimismo, ha afirmado que, tras las primeras horas, no ha vuelto a hablar con los amigos de su hija. Y es que “no me fío de nada ni de nadie, solo de los agentes. Aquí lo que hacen falta son cosas claras y verídicas, lo demás nada”.