La ministra Nadia Calviño colocándose la mascarilla

Se confirma un dato demoledor para España: 'Hasta 2022'

La OCDE afirma en su último informe que España será el país más castigado económicamente en 2020

España será el país más castigado del año 2020 tras Argentina y la OCDE prevé una caída del PIB del 11,6%, convirtiéndose en el país que más baje de todos los estados de la organización, por delante de Grecia y de Italia. Lo más positivo, la mejora prevista de un 5% en 2021 y de un 4% en 2022, por encima de la media de la eurozona en ambos años.

Aunque hubo un fuerte repunte en el tercer trimestre de 2020, «el nivel del PIB fue un 9,1% inferior al del último trimestre de 2019». Asimismo, el aumento de las cuarentenas «limitaron la recuperación de los sectores relacionados con el turismo». El número de turistas en el mes de septiembre fue del 87,1% menor que hace en 2019 y las transacciones con tarjetas de crédito extranjeras cayeron un 65% en octubre,

La OCDE explica en su informe de noviembre que los vaivenes en los viajes y el turismo «serán un lastre para la recuperación hasta que una vacuna efectiva se generalice». Además, añade que hay «incertidumbre» y que la pésima situación laboral «pesará sobre el consumo privado». Según se recupere la demanda externa, las exportaciones serán positivas para el crecimiento en 2021 y 2022. En cuanto a la tasa de desempleo, se situará en el 17,4% en 2021, para bajar en 2022 al 16,9%, según la OCDE.

El déficit subirá en España hasta el 11,7% en 2020

Además, la OCDE considera que la ratio de deuda estará cercana al 120% del PIB durante los próximos dos años. A su vez, el déficit subirá hasta el 11,7% en 2020 y se reducirá de forma gradual hasta el 9% en 2021 y el 6,6% en 2022.

La adaptación de políticas para ayudar a las empresas y los trabajadores «debe mantenerse», enfocando el apoyo fiscal a los más ciudadanos más afectados por la pandemia. Además, considera que la prórroga de los ERTE «deberían ir acompañados de más formación y políticas activas de mercado de trabajo más sólidas para preparar la reasignación de recursos entre empresas y sectores», explican en su último informe.

Por otro lado, la OCDE recuerda que el plan de recuperación nacional se centra especialmente en los objetivos de inversión digital y ecológica, «que deberían ser logrados mediante ambiciosas reformas estructurales para impulsar la productividad, crear empleos y mejorar el medio ambiente».

¿Qué necesita España para recuperarse económicamente de la pandemia?

El plan de recuperación económica de España presenta cómo se invertirán los 72.000 millones de euros que se espera que el país reciba de Europa. 26.600 millones de euros (2,1% del PIB) de estos fondos ya están dentro de los Presupuestos Generales de 2021.

«El fuerte repunte en el tercer trimestre de 2020 será seguido por una contracción en el cuarto trimestre», aseguran en el informe. Se espera que los efectos negativos de la pandemia sobre el sector de la hostelería, «se irán atenuando lentamente». Además, «la recuperación será gradual y el nivel del PIB se mantendrá por debajo de los niveles anteriores a la crisis a finales de 2022. El consumo privado se verá limitado por la recuperación incompleta del mercado laboral y el elevado ahorro preventivo». 

La OCDE alerta del riesgo de insolvencia en las empresas

«A corto plazo, se debe seguir prestando apoyo a los afectados directamente por las nuevas medidas de contención». A su vez, debería incentivarse capacitar a los parados «para mejorar sus perspectivas de encontrar un nuevo empleo en sectores y empresas en expansión». El SEPE debería reforzar «el apoyo individualizado, mediante la ayuda de herramientas de elaboración de perfiles, para facilitar la mejora de la capacitación de los trabajadores y mejorar la adecuación al mercado laboral». 

Por último, la OCDE alerta del riesgo de insolvencia en las empresas. «Las lagunas que aún existen en los regímenes de insolvencia deberían abordarse para acelerar los procesos de reestructuración extrajudiciales». Es clave, advierten, «la aplicación efectiva de las reformas estructurales anteriores que abordan la fragmentación de los mercados de productos en el mercado interno y debe aumentarse la coordinación y la evaluación de las políticas de innovación regionales y nacionales para mejorar la calidad de la innovación», sentencian.