Ithaisa Suárez y Yéremi Vargas

Caso Yéremi Vargas: 'Quiero encontrar lo que queda de mi hijo'

La madre de Yéremi celebra la reapertura del caso confiando en dar con los restos del pequeño

El caso de la desaparición de Yéremi Vargas vuelve a estar de actualidad. Las últimas informaciones sobre la detención de su padre por presuntos abusos a su hija, han reabierto las heridas.

Itahisa Suárez, madre del pequeño, desvincula a su expareja del secuestro del menor y pide que no se desvíe la  investigación. La familia no cree en la implicación de Juan Francisco Vargas y centra su objetivo en otro sospechoso.

Ahora, 14 años después de la desaparición de Yéremi, el caso se reabre por petición de la familia con la esperanza de hallar el cuerpo.

La madre de Yéremi Vargas quiere encontrar su cuerpo

Dos años son los que lleva la familia de Yéremi luchando para que el caso de su desaparición vuelva a abrirse. Una petición que, el juzgado de Primera Instancia número 2 de San Bartolomé de Tirajana, ha aceptado.

Desde aquel fatídico marzo de 2007, la madre del menor vive una auténtica pesadilla. Yéremi desapareció en las inmediaciones de su domicilio sin dejar ninguna pista sobre su paradero ni sobre su captor.

Años después, la detención por agresión a otro niño en 2012, hizo saltar las alarmas. Antonio Ojeda, más conocido como 'El Rubio', fue condenado a cinco años por aquel delito. Fue entonces cuando una confesión a un compañero de prisión le situó como el principal sospechoso de la desaparición de Yéremi.

No obstante, la falta de pruebas provocaron que el caso se cerrara. La familia del pequeño ha luchado hasta conseguir su reapertura. "Quiero encontrar lo que quede de mi hijo", manifestaba Itahisa Suárez con la esperanza de dar con él para poder despedirse.

"Quisiera llegar al final, ese es mi objetivo, es el objetivo de toda nuestra familia, me gustaría que la justicia llegue hasta el final", ha añadido.

Además, Itahisa ha querido mandar un mensaje "al culpable cuyo nombre todos conocen" para que "entregue lo que haya del niño". La madre del pequeño no confía en que su hijo esté vivo, pero no descansará hasta dar con el cuerpo.

"Si el niño no está vivo, que es lo más probable, le ruego que me dé lo que haya, para nosotros darle sepultura, lo necesitamos", añadía.

El foco está sobre 'El Rubio'

La familia de Yéremi está convencida de que Antonio Ojeda tiene algo que ver con lo ocurrido al pequeño hace 14 años. En este sentido, Marcos García-Montes, abogado de la familia ha pedido una serie de pruebas tras el trabajo efectuado con criminólogos.

Unas pruebas que señalan a 'El Rubio' como el único sospechoso de la desaparición. Ojeda, en libertad tras cumplir cinco años por otra agresión a un menor, negó su implicación en el caso de Yéremi.

Todas las alarmas saltaron cuando el propio Ojeda confesó a un compañero de celda haber terminado con la vida de Yéremi. Tras ser detenido, El Rubio admitió el crimen explicando que "el niño estaba azul" y  "tuvo que desaparecerlo".

Aunque podrían tratarse de unas declaraciones sin importancia, la familia se estremeció. El color azul al que hizo referencia Ojeda respondía a la patología que sufría Yéremi y que solo la familia conocía. Ese dato jamás trascendió a la prensa por lo que, solo alguien que hubiera estado con el menor podría conocerla.

Otra de las pruebas que no se tuvo en cuenta en el momento de la desaparición por ser contradictoria, fue la declaración de un testigo. Un niño de 11 años que se encontraba en la zona, vio a Yéremi subir a un coche blanco con unas palmeras atrás. El menor contó que era un Opel Corsa blanco conducido por un hombre con gorra, complemento que 'El Rubio' siempre llevaba.

Sin embargo, el coche que conducía Ojeda era un Renault 5 Oasis. Pero sí que tenía una pegatina de unas palmeras en la parte trasera del vehículo. Una pequeña contradicción que fue suficiente para que el juez desestimara el testimonio.

Ahora con la reapertura del caso, nuevas pruebas saldrán a la luz y podrían acercar a la familia a dar por fin con el culpable.