Madeleine McCann contaba con apenas tres años cuando desapareció. Dormía en un apartamento de Praia da Luz, en Portugal, junto con sus hermanos mientras sus padres cenaban en un restaurante próximo. Era mayo de 2007 y aquel caso se convirtió en todo un desafío para los investigadores.
No fue hasta cuatro años después cuando Scotland Yard inició la Operación Grange. Comenzaban unos trabajos de rastreo por su cuenta en vista de los escasos resultados cosechados por la policía lusa. Sin embargo, después de once años, la situación dará un giro radical.
El caso Madeleine está a punto de cerrarse debido a la falta de fondos por parte del Ministerio de Interior británico. El presupuesto se agotará en cuestión de días, en concreto el 31 de marzo.
La Policía Metropolitana de Londres había recibido en el último ejercicio una partida de unos 500 000 euros para continuar con los trabajos. Ahora, han reclamado otra subvención para alargar la investigación al menos hasta septiembre.
El dinero del Gobierno destinado a encontrar a la niña asciende ya a 15,5 millones de euros. El tabloide The Sun devela que "el final del camino para la Operación Grange está a la vista", según confiesa una fuente. Por su parte, un portavoz de la Policía explica que "la investigación está en curso" y que la financiación "es un asunto del Ministerio".
En Reino Unido se tomaron muy en serio la desaparición de Madeleine McCann. Durante un periodo, la Policía Metropolitana tuvo trabajando a 40 personas en el caso. En la actualidad, esa cifra se ha reducido a tan solo cuatro detectives.
Lo hacen bajo el control de la jefatura de casos sin resolver. Ellos son los responsables de notificar a los padres de la menor cualquier tipo de avance que vayan experimentando. Tanto Kate como Gerry, de 54 años, hacen todo lo posible para que se mantenga las investigaciones.
El caso de Madeleine McCann podría cerrarse sin que nadie sea condenado. El único sospechoso es Christian Brueckner. Se trata de un violador y pedófilo que pudo estar en el lugar de la desaparición, sospechan los agentes.
Contra él no se han presentado cargos. En estos momentos se encuentra en prisión cumpliendo una condena de siete años tras acosar sexualmente de una mujer de 73 años. Los hechos tuvieron lugar muy cerca de donde se le perdió la pista a la pequeña.
Las investigaciones llevadas a cabo por la policía alemana determinaron que Brueckner la había matado. Sin embargo, no existen las suficientes pruebas para inculparle.
El caso Madeleine McCann dio la vuelta al mundo
Los padres de Madeleine McCann no pierden la esperanza y creen que la joven se encuentra todavía con vida. El mayo de 2021 explicaban en un comunicado que pese a la pandemia, "la investigación para encontrarla a ella y a su secuestrador continuaba".
Una fuente próxima a la investigación desvela que "en la actualidad no hay planes para llevar más lejos el trabajo". Los mejores policías fueron incapaces de encontrar pruebas contra el principal sospechoso. No descartan que el expediente vuelva a reabrirse en el futuro en caso de que salga a la luz algún detalle significativo.
La investigación por parte de Reino Unido se inició en mayo de 2011 después de que la madre de Maddie escribiera a David Cameron. Solicitaba al entonces primer ministro que la policía de su país se ocupará de la búsqueda.
Ahora ya no hay fondos para seguir con el caso de Madeleine McCann. Sus padres están al tanto de ello. Lo más probable es que continúen con los trabajos para encontrar a su hija por medio de fondos privados.