Montaje con foto del lugar del crimen

La autopsia de Erika, la niña de 14 asesinada en España, revela novedades

Erika fue brutalmente asesinada por un vecino que le acosaba desde hace tiempo

La ciudad de Oviedo sigue en shock después del crimen que tuvo lugar este martes en un tranquilo barrio del oeste de la capital asturiana. Y es que la joven ecuatoriana Erika Yunga fue asesinada por uno de sus vecinos. Una muerte que ha dejado consternada a toda la población ovetense.

El detenido, de 32 años y natural de Moldavia, la sorprendió en el rellano de la escalera cuando se dirigía hacia su casa tras volver del 'Instituto de La Ería'.

Foto del levantamiento del cadáver
Levantamiento del cadáver el pasado martes por la tarde en Oviedo | EC

Tras llamar al timbre del portal, su padre le abrió la puerta, pero se extrañó de que pasados unos minutos, la joven Erika Yunga no llegara al piso donde residían. Al tardar tanto tiempo en subir, el hombre alertó a uno de sus hijos para que bajase hasta el portal al encuentro de la joven.

El chico se encontró en el rellano con un reguero de sangre que conducía hacia el interior de un piso de la primera planta en el que residía el detenido. Una imagen dantesca que hacía temer lo peor.

La familia de Erika Yunga sigue en shock tras el asesinato

Tras llamar a la policía, varias patrullas de la Policía Nacional llegaron al lugar de los hechos y accedieron a la vivienda desde el patio interior. Así, los agentes hallaron en su interior a la menor tendida en el suelo con varias heridas de arma blanca y al moldavo, igualmente herido de gravedad.

Montaje con foto de los padres de Erika
Los padres de Erika Yunga se despidieron de ella rotos de dolor | España Diario

Todo ocurrió cuando el moldavo se encontró con ella mientras subía hacia su casa y le asestó varias puñaladas, acabando con su vida de la forma más cruel posible. Un suceso que ha conmocionado a todos los que conocían, y que la definían como una "muy buena niña y un angelito".

El hombre fue detenido allí mismo como presunto autor de un delito de homicidio y fue trasladado al centro hospitalario para ser atendido de varias heridas. Unas lesiones graves que, según apunta la policía, se habría provocado él mismo tras cometer el salvaje crimen.

Novedades tras la autopsia al cadáver de Erika

Según pasan los días, se van conociendo más novedades de este caso. Un crimen que marcará un antes y un después en la vida de esta familia, que llevaba más de 20 años residiendo en Oviedo.

La autopsia de Erika Yunga, la niña de 14 años asesinada por un vecino en Oviedo, ha desvelado que la menor no sufrió una agresión sexual por parte del detenido. El cuerpo de la joven presentaba varias heridas de arma blanca, algunas de ellas de carácter defensivo, pero no se aprecian restos de agresión sexual. 

Foto del lugar del crimen
Portal donde ocurrieron los trágicos hechos en un tranquilo barrio de la ciudad de Oviedo | EC

El detenido tras el asesinato de Erika es un hombre de 31 años que tiene antecedentes por agresión sexual y que al parecer acosaba a la joven ecuatoriana.

Aunque la menor no sufrió una agresión sexual, Delia Losa, delegada del Gobierno en Asturias, se ha referido a las consecuencias de este terrible suceso para el asesino. 

Muere una mujer de 47 años a manos de su ex pareja

Así, ha afirmado que la Policía Nacional tiene "pruebas más que suficientes" de que el detenido mató el martes a puñaladas a Erika en el edificio en el que ambos residían en Oviedo. Además, pone de manifiesto que queda claro que cometió un "asesinato" porque fue arrestado en ese lugar "prácticamente con las manos en la masa".

El detenido llevaba apenas tres semanas viviendo en el edificio

A día de hoy, no se conoce cuando se podrá poner al detenido a disposición judicial, ya que aún permanece ingresado en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Continúa siendo atendido de las heridas por arma blanca que habría cometido contra su propia persona tras cometer el crimen. Eso sí, "su estado, en principio, no corre peligro", ha expuesto Delia Losa.

El detenido llevaba solo tres semanas viviendo en un piso de la primera planta del número 69 de la calle Vázquez de Mella, en el barrio ovetense de Vallobín.