Una mujer de 30 años que volvía a casa ha sido agredida esta noche por cuatro individuos en el barrio de Mendizorroza, Vitoria. Los golpes le han dejado la cara como un mapa, pero lo peor es lo que le gritaron antes, digno de una película de terror: “Te vamos a destrozar esa cara guapa que tienes”.
La agresión ha tenido lugar a las 4 de la madrugada, cuando la mujer se dirigía a su casa. “Tranquila, ni te vamos a violar ni a robar, solo queremos reventarte la cara”, le han gritado. Los cuatro asaltantes la han golpeado y luego han abandonado el lugar de los hechos.
La joven ha tenido que ser ingresada en el hospital debido a los golpes, y luego ha puesto la correspondiente denuncia. Los agentes de la Ertzaintza han abierto una investigación y están analizando las cámaras de seguridad. La principal hipótesis es que fue una agresión al azar y sin motivo aparente, por pura diversión.
Cuatro hombres de origen magrebí
Según la denuncia, la joven es vecina del barrio de El Batán y caminaba hacia su casa cuando fue asaltada de madrugada. En los jardines que hay entre las calles Nieves Cano y Salvatierrabide, se ha visto rodeada por cuatro hombres de origen marroquí. “Vamos a ver cómo te destrozamos esa cara guapa”, le han dicho.
Después de la amenaza han pasado a la acción, golpeándole y provocándole varias heridas en el rostro. Aún con los nervios pero ya a salvo, la chica ha llamado a sus padres que viven a 200 metros del lugar. Su padre ha acudido en su ayuda y ha solicitado la presencia de la policía autonómica vasca.
Agentes de la Ertzaintza han atendido a la víctima y han abierto una investigación. La chica ha formalizado una denuncia en la que asegura que cuatro hombres la han rodeado, la han amenazado y la han golpeado. En el momento de la agresión se encontraba sola e indefensa, en una zona oscura de jardines.
No le robaron nada
Primero la siguieron, ella intentó ganar distancia pero le cerraron el paso, la golpearon y huyeron. No le robaron ninguno de los objetos que llevaba encima, ni cometieron ningún acto de abuso sexual. Tal y como anunciaron en su amenaza, solo querían golpearla.
La chica ya ha recibido el alta hospitalaria y se encuentra en su casa recuperándose del susto y de las lesiones. La policía sigue buscando a los autores de la agresión, que ha generado un amplio rechazo social y político. Políticos, asociaciones y sociedad civil han mostrado su solidaridad abierta con la víctima.
- TE PUEDE INTERESAR: Erika, la mujer asesinada delante de sus hijos por su ex en Vitoria
- EL AUTOR RECOMIENDA: Nuria, la adolescente a la que su amigo quiso matar para saber qué se siente
La asociación de vecinos de Batán pide a la policía que identifiquen a los autores y han mostrado su cercanía y solidaridad con la chica y sus familiares. También han convocado una concentración de rechazo, que se celebrará hoy a las 8 de la tarde en el lugar donde ocurrieron los hechos.
Rechazo del mundo político
El alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, también se ha pronunciado sobre la agresión, a la que ha calificado de “muy grave”. Ha expresado su “rotunda condena” y ha hecho referencia a la nacionalidad de los agresores: “Las personas no somos ni mejores ni peores por nuestra nacionalidad, sexo o religión”.
“Estos desalmados sí merecen un castigo ejemplar”, ha concluido. Por su lado, la portavoz del PP en la ciudad, Ainhoa Domaica, ha sido tajante al decir que “esta gentuza sobra en Vitoria”. Ha pedido una reunión urgente de la junta de portavoces para analizar los hechos.
Los populares van un paso más allá y denuncian la sensación de inseguridad que se vive en la ciudad. “Es muy preocupante el incremento de la violencia, inseguridad y agresiones en nuestras calles”, ha dicho, y se ha preguntado “qué está pasando en Vitoria”.
Pocos días después de la muerte de Erika
La sociedad vitoriana vuelve a rebelarse ante una agresión a una mujer, pocos días después del asesinato de una mujer a manos de su exmarido. Erika, de 27 años, murió a manos de su expareja Oskar el 12 de octubre, en su domicilio de Sansomendi. Vivían juntos, pero estaban en trámites de separación.
Sus dos hijos de 13 y 17 años estaban en casa en el momento de la agresión. La víctima era una mujer muy conocida y muy querida en el barrio, y su muerte causó una profunda conmoción. Políticos y sociedad civil también reaccionaron ante esa agresión, una más de la violencia de género en España.
Vídeo de Santi, el español hallado muerto en la bañera