Ylenia Carrisi, hija de Al Bano y Romina Power, desapareció de forma repentina en 1994. Por aquel entonces, el matrimonio era conocido mundialmente, así que el caso tuvo una gran repercusión.
Lydia Lozano empezó a seguir una serie de pesquisas que le llevaron a cometer el gran error de su trayectoria profesional. “Yo tenía un currículum intachable y ya no lo tengo”, comentó entre lágrimas durante La Caja Deluxe.
El programa de Jorge Javier repasó la vida de la periodista en la sección anterior y salieron a la luz ciertos detalles bastante sorprendentes. La colaboradora dejó claro que jamás tuvo intención de hacer daño, pues únicamente quería ayudar a la familia.
Los allegados de la desaparecida habían perdido la esperanza porque penaban que la joven se había quitado la vida. Un testigo la vio tirarse al río Misisipi, aunque hubo gente que jamás confió en dicha versión.
La canaria formaba parte de este último grupo y lideró una investigación que resultó ser un auténtico fraude. Estaba convencida de haber localizado a la hija del cantante, pues tenía en su poder unas pruebas que parecían fiables.
Cometió el error de no contrastar la noticia tanto como hubiera sido necesario e hizo pública la información delante de millones de espectadores. El tiempo demostró que nada era cierto, pero Lydia estuvo dando voz a rumores sin fundamento durante unos meses.
Al Bano le interpuso una demanda millonaria, aunque el proceso no llegó a buen puerto por la mediación de Telecinco. El caso generaba unos datos de audiencia extraordinarios y hubo gente que ganó mucho dinero hablando del tema.
La prensa italiana ha resucitado el triste suceso, así que Lozano ha vuelto a recordar todos los errores que cometió en el pasado. Después de tantos años sigue arrastrando el lastre, así que se ha negado a hacer ninguna declaración al respecto.
La colaboradora se solidariza con los Carrisi
El artista siempre ha tenido clara su postura. Está convencido de que Ylenia ha perdido la vida en el mar y no quiere saber nada de quienes informan lo contrario.
La colaboradora se ha convertido en una de sus grandes enemigas, por lo que se niega a comentar la noticia que circula por Italia. Es consciente de que cualquier reacción podría jugar en su contra, motivo por el que ha mantenido un escrupuloso silencio.
“Solamente pienso en que yo dije que no volvería a hablar del tema. Ya hace dos años se me puso en mitad del plató con una noticia de que estaba en convento en California “.
La canaria insiste en que su turno ha terminado y ahora deben ser los nuevos informadores los que aporten los datos que han encontrado. “No tengo nada que decir”, ratificó.
A pesar de que pone mucho empeño por no ofender a la familia Carrisi, el italiano siempre la tiene en su punto de mira. Pero la tertuliana asegura que “lo comprende” y que “lo respeta muchísimo”.
Al Bano ha roto su silencio después de que enterarse de que hay medios que han rescatado el tema de nuevo. Automáticamente se ha acordado la integrante de Sálvamey no le ha dedicado unas palabras demasiado bonitas.
“Son todos hijos de Lydia Lozano, no hay un kilo de verdad. Mi hija no está en la tierra”, declara al respecto.
Según ha informado el programa de Jorge Javier, todos los que tenían relación con la joven están seguros de que no volverán a verla. “Solamente Romina continúa buscándola”, informan desde Telecinco.
Han pasado 27 años desde que la joven fue vista por última vez. Sus allegados han perdido la esperanza, pero ciertos investigadores siguen detrás de la noticia de sus vidas: encontrarla con vida.