Verónica Forqué y el traumático divorcio con su marido: 'Fue horrible'

Verónica Forqué ha fallecido tristemente este lunes. Una noticia totalmente inesperada y que ha cogido por sorpresa a todo el mundo. Pues la actriz madrileña era una de las más queridas de la escena actoral española.

La actriz ha sido hallada muerta en su domicilio de la calle Víctor de la Serna de Madrid. Los servicios de urgencia del Summa 112 recibieron el aviso pero nada pudieron hacer cuando han llegado para salvar su vida. 

Verónica hablaba con frecuencia de su matrimonio

Con bastante frecuencia se le pudo escuchar hablar en público de su matrimonio y de su exmarido, del que se separó en 2014. Se trata de una etapa de su vida que decía que pretendía olvidar, aunque sin demasiada fortuna.

Con Manuel Iborra estuvo casada 30 años. Es un conocido director de cine y series de televisión. Entre sus éxitos se encuentran Caín, Tres por cuatro, Pepa y Pepe y La mujer de tu vida.

Después de tres décadas de convivencia, Verónica Forqué optó por ponerle el punto y final a la relación. No tuvo reparos en detallar los motivos que la llevaron a tomar esta decisión. "Nos separamos porque era incapaz de vivir una realidad que no era verdad", dijo en su momento.

La actriz fue más allá y admitió que "era horrible darte cuenta de que no sientes nada por tu pareja". Todo ello después de "34 años juntos". En aquel momento tenía la impresión de que salía "muy fortalecida" con la postura que había adoptado.

Tuvo claro que solo hubo un responsable de esa ruptura. "Se acabó porque él quiso que se acabara", señalaba. La relación desencadenó en un "aburrimiento de vida", que la hacía sentirse "una vieja de 80 años".

Forqué destacaba que Iborra "ha sido un gran padre y muy organizado en casa y lo que tú quieras, pera era muy soso". Aunque se llevaban muy bien, la vida en común era bastante pobre.

"Si yo hiciera una lista de los planes que hemos hecho juntos en 34 años, bastaría con los dedos de una mano", contó.

Los últimos años del matrimonio resultaron muy duros para la concursante de MasterChef. La inseguridad de su marido la acabó condicionando en muchos aspectos de la vida. 

Explica que ella tuvo "una depresión severa en 2014 y no sabía lo que pasaba. Pedí ayuda, fui al psiquiatra, que me mandó una medicación que él no me dejaba tomar y llegué a tomar pastillas a escondidas".

Durante una de las visitas al psicoanalista consiguió abrir los ojos. El profesional le dijo que "el problema no es Manolo, el problema eres tú. Que permites que no te deje hacer un viaje con tu amiga, no te deje esto y lo otro".

Verónica Forqué tenía claro que debía plantarse

Llegado a ese punto, Verónica Forqué se planteó un cambio radical en su vida. Ahí fue cuando "me di cuenta de que ya no le amaba más. Se me vino el mundo encima", declaraba en una entrevista.

Fruto de esta relación nació hace 31 años María Clara, una polémica artista de vanguardia. Se presenta como la española "más censurada por las redes sociales". Es capaz de vender sus bragas usadas o de visitar sin ropa el Palacio Real de Madrid.

No parececía dispuesta a fijarse un límite. Contó que le encantaba crear "cosas estéticas que atraigan" al público, pero que la vez también "incomodasem". En Instagram contó con un amplio número de seguidores que rebasa los 126 000 fans.

También encontró un hueco en Onlyfans. Se trataba de una plataforma dedicada al contenido para adultos, donde muestra sus obras sin censuras. Reconocía que así podía obtener al mes hasta casi 5000 euros.

Verónica Forqué compartía el estilo de vida de su hija. La definía como una chica "muy lista, un ser maravilloso y adorable. Nos queremos mucho, nos reímos mucho juntas y nos llevamos muy bien", apuntaba en XL Semanal.

La actriz se convirtió en una de las concursantes más polémicas de la presente edición de MasterChef. Sus continuos enfrentamientos con los compañeros le han hecho ganarse las críticas de los espectadores.

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