Rocío Flores ha vivido uno de sus peores días como tertuliana de El programa de Ana Rosa después de estar unos días sin aparecer por Telecinco. Un parón televisivo que aprovechó su madre para hablar sin tapujos sentada en el mismo sofá que ocupaba su hija horas más tarde.
Rocío Flores se enfrentaba a uno de los programas más complicados y, sin duda, los nervios estaban a flor de piel más que nunca. Joaquín Prat adelantaba minutos antes de su aparición que "ella va a estar aquí, pero no nos pareció oportuno que vea esos vídeos de su madre", ha dicho.
"Lo que es seguro es que su hija sí que vio el programa", le espetaba Jorge Pérez, colaborador de Ya es mediodía y amigo de la joven.
Rocío Flores da el portazo definitivo a su madre
La hermana de David Flores entraba al plató y comenzaba diciendo acerca de la entrevista a su madre que "no cambia nada lo de ayer. No esperaba nada distinto, me hubiese gustado que me dejara de lado desde el documental y ya... Lo hecho, hecho está, pero es tarde", sentenciaba la hija de Antonio David Flores.
Sobre una posible reconciliación con la madrileña, la colaboradora de Telecinco sostenía que "esa puerta va a seguir cerrada. Lo tengo muy presente que no va a haber reconciliación. La parte positiva es que me dejen respirar...", ha proseguido una Rocío Flores llena de tristeza.
Sin duda, unas palabras que a muchos no les ha sorprendido demasiado. Para los mayores enemigos de la joven, esta nunca se habría interesado en retomar su relación con Carrasco.
Son muchos años influenciada negativamente por Antonio David y su círculo más cercano sabe perfectamente que esa relación está rota. Y eso a pesar de los 'intentos' de la joven de llamar la atención de su madre. Unas peticiones de reconciliación que parecieron más de cara a la galería que una llamada sincera para tender puentes con su madre.
"Me veo sometida a una presión que ya he tocado fondo"
Rocío Flores se rompió en directo y confesaba: "estoy cansada de llorar ya, me veo sometida a una presión que ya he tocado fondo. Respeto lo que cada uno haga, pero espero que se me respete a mí. No quiero ni entrar en lo negativo, lo hecho, hecho está y yo necesito mi tiempo, recomponerme y pensar en mí, mi salud".
"Sufro por mí, pero tengo dos hermanos y me duelen los dos. Tengo una hermana con 9 años y me duelen muchas cosas por ellos", ha sentenciado.
Mientras, los colaboradores del programa se han quedado conmocionados tras ver a la Rocío Flores más vulnerable. "Las guerras no se ganan ni se pierde, aquí se estableció una guerra y deja rencor. Tienen que situarse en bandos. No hay buenos ni malos, la gente se equivoca, si no somos capaces de sobreponernos y empezar a vivir es imposible reanudar relaciones", ha opinado Bibiana Fernández.
"A pesar de que lo reconozca como un error, no se le puede acusar sobre un papel que estaba bien, lo que pasó después fue después".
Por su lado, Alessandro Lequio quiso explicar en qué punto está su opinión sobre la figura de Rociíto, con la que ha sido muy dura. "Ayer vi a tres Rocíos, la que hablaba delante de las cámaras, la de los pasillos, pero la más interesante era la de los gestos. Ella se estremecía cuándo hablaba de su hija, yo sí veo esa puerta abierta", ha sentenciado.