Rocío Carrasco confirmaba la semana pasada su vuelta a televisión, concretamente como colaboradora de 'Sálvame'. Pero no ha sido hasta este pasado miércoles que hacía su debut en su propia sección. Y su primera participación en el programa ha recibido una acogida desigual, pues hay quien cree que no "da la talla" en ese espacio.
Con esta afirmación tan contundente titulaban una crítica televisiva de su debut en La Vanguardia. Lo hacía el redactor jefe de la sección de gente de ese medio, Albert Domènech. Compartía un vídeo donde analizaba su aparición desde lo puramente televisivo, sin que "entre en juego otras connotaciones personales".
Precisamente cree que es en eso, su presencia televisiva, donde radica el principal problema de Rocío en 'Sálvame'. El periodista quería basar su crítica en lo que él quiso definir como las "tres c" televisivas: carisma, consecuencia y coherencia.
Sobre la primera, no duda en asegurar que Rocío Carrasco "carece completamente del carisma" para llevar una sección como la suya. Además, piensa que su propio carácter "juega en su contra". Insiste en que la televisión te quiere o no te quiere, y el caso de Rocío es el segundo.
Afirma que se la pudo ver la televisión insegura, incómoda y desubicada. Otra cosa que le critica es que le falta ritmo para una sección de ese tipo. Rocío Carrasco no sabe imponerse o reaccionar a las polémicas con el resto de colaboradores, asegura.
Los motivos por los que Rocío Carrasco no está siendo coherente
Las otras "dos c" a las que hacía referencia eran consecuencia y coherencia. Por un lado, le pide que sea consecuente con lo que ha venido pregonando. No cree que un espacio dedicado a la crítica a los demás la beneficie a ella.
Cree que la productora se estaría aprovechando para futuros programas. Que se está intentando "seguir estirando el chicle de lo que realmente importa", que es su vida personal. Ve que corre peligro su discurso y que criticar lo que hacen los colaboradores no es coherente con el mismo.
Domènech sigue insistiendo en que la elección de su sección no es acertada. Hubiera sido un mejor espacio de denuncia en persona que estuvieran pasando una situación similar a ella. Además critica que se llame Hable con ella, y en él "habla todo 'quisqui' menos ella".
Crítico con el uso del pinganillo de Rocío Carrasco o con los contenidos de su sección
Hay otros diversos puntos de la sección de Rocío Carrasco en Sálvame que ha criticado también duramente. Uno de ellos es el uso "muy poco profesional" del pinganillo por parte de Rocío. Afirma que se nota demasiado que en todo momento está recibiendo instrucciones sobre lo que hacer.
Tampoco cree que sea muy correcto vender la idea de que es Rocío quien está seleccionando los contenidos de su sección. No es creíble que digan que se han recibido más de 5.000 llamadas y que ella haya hecho filtro. Es el equipo el que hace "el trabajo sucio" y el que acaba decidiendo que mensaje utilizar.
Es más asegura que se está prestando para que utilicen su imagen en beneficio de la productora. Y es que al utilizar uno u otro mensaje puede acabar escogiendo que polémicas salgas en el programa.
Otro de los problemas de coherencia que vio el otro día fue la llamada donde se criticaba a María Patiño. No es coherente que Rocío dijera que "no podemos juzgar a una mujer por su edad ni por su físico". El periodista piensa que no había necesidad de pasar ese mensaje.
Concluye que se pudo acabar generando una desigualdad entre colaboradores. Que Rocío Carrasco se convierta en "el azote contra otras profesionales" y que por eso se debe hacer responsable.