Roberto Leal es prácticamente un desconocido para la mayoría. Se le puede ver todas las tardes en Antena 3 al frente de Pasapalabra, pero siempre ha sido muy discreto con su vida privada. Ahora atraviesa por uno de sus mejores momentos en lo profesional, inmerso en varios proyectos de Atresmedia.
También presume de contar con una familia maravillosa, a la que le dedica la mayor parte del tiempo libre. Junto a su mujer, Sara Rubio; y sus dos hijos, Lola y Leo, ha conseguido formar un equipo de ensueño.
Roberto Leal empezó siendo reportero y con el tiempo se fue ganando un espacio en distintos programas de televisión. Asegura que nunca se le ha subido la fama a la cabeza y que la clave de todo esto reside en tratar de "relativizarlo todo".
Las audiencias que registra a diario con su concurso de Antena 3 le sitúan como uno de los espacios con más espectadores de la televisión. El presentador trata de mantener los pies en el suelo en todo momento, consciente de que esta situación tiene fecha de caducidad.
"Siempre he tratado de huir de eso. El hecho de que el programa lo haga está bien, tú estás dentro y te sientes partícipe", afirma.
En su opinión, hay que aprovechar los buenos resultados para "disfrutarlo y estar orgulloso de lo que estás haciendo". Eso sí, Roberto Leal tiene bien claro "que no será para siempre".
Sabe que muchos compañeros de profesión pasaron por su misma situación y han caído en el olvido. Por eso, insiste en la necesidad de ser humilde y aprovechar esta buena racha.
Durante la conversación que mantuvo con Chicote, también se le preguntó por su relación con las redes sociales. Los famosos se ven obligados a soportar muchas críticas y en algún momento incluso insultos. El andaluz trata de no prestarle demasiada atención, preocupándole únicamente la opinión de los suyos.
"Gente que te quiere, lo hace por lo que tú eras", señala Roberto Leal. Poco a poco ha ido asimilando su salto a la fama. Después de tantos años en la pequeña pantalla, todavía se sorprende cuando le piden una foto por la calle.
Entre risas, suelta que su madre posiblemente lo lleve mejor que él. "Ella saca pecho y me dice: hombre, a saber cuando vuelvo a salir en una revista", destaca.
Nos encontramos ante el presentador de moda, a Roberto Leal le confían uno de los programas de referencia de Antena 3. No se le olvida que para llegar a saborear las mieles del éxito ha tenido que construirse una carrera de muchos años.
En lo personal se declara "irascible, no me gusta la mentira y los abusos de poder". Cuenta que a lo largo de su trayectoria profesional ha cambiado varias veces de empleo, pero "nunca me he ido mal de un trabajo". Entiende que no hay que "pegar portazos y hay que dejar la puerta entreabierta por lo que pueda pasar".
Roberto Leal no se olvida de su gente
Siempre que puede, Roberto Leal trata de acercarse hasta Alcalá de Guadaira, en Sevilla. Es su pueblo natal, donde tiene a sus amigos y donde consigue desconectar por completo de su trabajo. Allí lo pasa en grande y es realmente feliz.
Explica que "con mis amigos del pueblo no hablo de tele. Vamos a desayunar tostada gorda y café en vaso hirviendo". Señala que "en tu pueblo, tus raíces, tu madre y los pies en la tierra, no necesitas nada más".
No se olvida de sus orígenes, y siempre que sus compromisos personales se lo permiten, se acerca hasta Sevilla.
En muy poco tiempo veremos a Roberto Leal con nuevos proyectos en Atresmedia. Este miércoles, de momento, estará al frente de la final de Lego Master.