Miguel Frigenti es uno de los colaboradores de Sálvame más controvertidos. Y es que su vehemencia y sus malas formas, en muchas ocasiones, dan lugar a situaciones realmente complicadas en un plató.
No obstante, parece que esta manera de ser también le genera problemas fuera de las cámaras. Así, se ha desvelado un incidente que ha tenido con dos compañeras del programa y que no ha gustado nada a la dirección. Al parecer, ha actuado con ellas de manera déspota.
Miguel Frigenti tuvo un pésimo comportamiento con dos integrantes de Sálvame
En la tarde de ayer fue cuando Sálvame se desveló que Miguel había tenido un comportamiento bochornoso y lamentable con dos de las azafatas que trabajan en aquel.
Todo sucedió, según comentó Sergi Ferré, el pasado martes en la zona de camerinos de las instalaciones de Telecinco. En concreto, en el camerino número 13, “que es de uso común y lo puede utilizar cualquier compañero”.
En palabras de aquel, en Sálvame “se vivió un episodio muy desagradable”. Miguel, como se recogió en un faldón, “va de divo y sacó a relucir su lado más chungo”.
Realmente lo que pasó es que “montó un pollo brutal. Él tuvo un encontronazo con dos azafatas a las que dedicó unas palabras muy desagradables. Se dirigió a ellas de muy malas formas y con unos humos que no serían los adecuados”.
“Hasta la planta de abajo se escuchaban sus gritos”.
Los testigos del comportamiento de Miguel Frigenti deciden hablar
El hecho de que el lugar donde sucedió todo sea una zona de paso frecuentada por muchas personas de la cadena propició que varios trabajadores asistieran al incidente.
Una de las personas que presenció el momento, que ha querido mantener su anonimato, contó: “Fui testigo de una situación muy incómoda y violenta. Sobre todo, porque todos somos compañeros y todos trabajamos en esta cadena”.
De igual modo ha explicado: “Escuché a Miguel gritar y pidiéndole explicaciones a las azafatas del porqué habían metido en 'su camerino' a Luis Rollán. Él gritó a una de las azafatas, les habló en un tono tan despectivo y tan clasista. Era el típico tono de «¿Pero tú con quién te crees que estás hablando»”.
“Fue muy desagradable. Lo que vi yo y lo que vio todo el mundo es que Frigenti se comportó como un auténtico déspota. Fue completamente inadmisible”.
Otra de las personas que asistió al lamentable comportamiento del joven fue un colaborador de Sálvame. Nos estamos refiriendo a Rafa Mora.
El valenciano expuso: “Yo estaba en el camerino 14 y lo escuché prácticamente todo. Fue una vergüenza y un despropósito”.
Frigenti se arrepiente de lo sucedido
Tras darse a conocer lo que sucedió, el protagonista del lamentable hecho decidió tomar la palabra en directo. Lo hizo para decir: “Pedí disculpas a la azafata, lo vuelvo a pedir y lo pediré las veces que haga falta. Es verdad que la situación que se vivió no se tenía que haber producido en ningún momento y soy el responsable de ella”.
“Estoy muy arrepentido y también muy avergonzado”.
Pero, el programa de ayer no solo desveló la actitud reprochable del colaborador con dos compañeras. También le dejó en evidencia al mostrar una serie de conversaciones que vienen a dejar de manifiesto que podría haberle sido infiel a su pareja, Nuha. El supuesto amante no es otro que Christian Suescun, que confesó que aquel le había pagado 250 euros por tener una videollamada íntima con él.