Miguel Báez Spínola, 'El Litri', disfrutaba el pasado 14 de mayo uno de los días más felices. Y es que se casaba por segunda vez, en este caso con Casilda Ybarra de Fontcuberta. Boda tras la cual se marcharon de viaje de novios, pero esta escapada romántica la han tenido que suspender por los fallecimientos de los padres de él.
Primero murió su padre, Miguel Báez Espuny, y 15 días después lo hizo su madre, María Concepción Spínola González.
'El Litri' sufre la primera pérdida
El que fuera marido de Adriana Carolina Herrera contrajo matrimonio con Casilda este mes de mayo teniendo una ausencia muy importante. En concreto, la de su progenitor, pues llevaba un tiempo afrontando una enfermedad y su estado de salud le impedía viajar. Razón por la que no pudo tener a su maestro, profesional y personal, a su lado.
uvo que conformarse con tenerlo en su mente y sintiendo de corazón que estaba allí. Y con este sentimiento disfrutó al máximo de su enlace en una finca de Sevilla. Lo hizo en compañía de sus amigos, de sus hijos y de su madre, que ejerció como madrina.
Acto seguido, el que fuera torero se marchó fuera de España de luna de miel con su mujer, pero cuatro días después tuvieron que volver. El motivo es que su padre, de 91 años, había muerto.
Sereno, pero roto por dentro, se mostró Miguel durante el funeral y el entierro del que fue uno de los grandes toreros de la historia. Así, se convirtió en el principal apoyo de sus dos hermanas, Rocío y Myriam, y de modo especial de su madre. Y es que esta se encontraba destrozada, pues se separaba del que había sido el gran amor de su vida, con el que había estado casada 55 años.
'El Litri', sorprendido por la segunda muerte
Miguel Báez Spínola, a pesar del dolor por la marcha de su progenitor, sacó fuerzas y optó por reanudar su luna de miel días después. Por este motivo, se trasladaron hasta Italia y fue allí donde recibió el segundo varapalo. Sus familiares se ponían en contacto con él para contarle que su madre había fallecido de manera inesperada.
Concepción estaba sufriendo por la pérdida de su esposo, pero era fuerte y tenía ganas de seguir adelante por sus hijos y nietos. Sin embargo, el destino le ha jugado una mala pasada. 15 días después de la muerte de aquel, se ha producido la suya.
El pasado lunes 6 de junio era cuando ella perdía la vida tras sufrir un fulminante infarto mientras dormía en su cama.
Según se ha podido desvelar, el día anterior, durante una comida con una de sus hijas y con otro familiar, reconoció que no estaba bien. Les expuso que tenía unos dolores musculares en sus brazos. De ahí que hicieron que contactara con su médico y este le indicó la ingesta de unos medicamentos, sin saber lo que pasaría horas después.
La familia está absolutamente consternada por esta sorpresivo suceso. De modo especial lo está el que fuera torero, pues ha visto que la felicidad por su matrimonio se ha visto empañada por una auténtica tragedia.
n menos de un mes ha perdido a dos de las personas más importantes de su vida, sus grandes pilares y apoyos.