Laura Sánchez siempre se ha caracterizado por hacer frente a todos los retos a nivel personal y profesional. Además de ser modelo y actriz, la sevillana tiene dos empresas. Como todo el mundo sabe, la andaluza ha participado no hace mucho en ‘MasterChef Celebrity’, un programa al que cogió mucho cariño.
A nivel de interpretación, Laura Sánchez ha vuelto a grabar su papel de Pepa Miranda en la serie ‘Los hombres de Paco’. A su vez, su vida laboral la compagina con la faceta de madre de su hija Naia, que tiene 15 años.
Pero, no todo es bonito en la vida de esta famosa modelo. Hace no demasiado tiempo, la actriz ha sido diagnosticada de diabetes, una enfermedad crónica con la que no le queda más remedio que convivir.
La modelo ha hablado en la revista ‘¡Hola!’ de todo ello. Asimismo, la empresaria no ha tenido ningún tipo de complejo en enseñar el parche en el brazo que le mide los niveles de azúcar.
Además, ha relatado su experiencia con esta complicada enfermedad que padece. Asegura que se mantiene fuerte ante esta adversidad y que lo ha aceptado como una mujer adulta que es. Tras una revisión ginecológica, se hizo unos análisis y tras dar unos niveles de azúcar muy altos, le diagnosticaron la diabetes.
La enfermedad de la modelo que le trastoca su vida diaria
«Mi páncreas no llega ni a la mitad de su capacidad y dejará de funcionar en algún momento. Para eso voy con una neverita con la insulina a todas partes», ha confesado la empresaria en ‘Hola’.
Unas palabras con las que saca a la luz esta enfermedad con la que, poco a poco, está conviviendo como buenamente puede. Ella considera que esta enfermedad ha sido un claro aviso de su cuerpo, que le ha dicho «basta». La realidad es que han sido muchos años de pelea para poder estar más tiempo junto a su hija.
«No he vivido su infancia como a mí me hubiera gustado. Cuando todo se relaja, sabía que mi cuerpo iba a decir: ahora reacciono yo», ha desvelado.
El caso es que se separó del padre de su hija, el exfutbolista Aitor Ocio, cuando la pequeña tenía apenas dos años. Desde aquel momento, entre Sánchez y Ocio ha habido una lucha de titanes por conseguir la custodia de la niña, que ahora es una adolescente.
«La gente tiene una imagen de mí riendo, pero he llorado mucho», ha dicho. Además, la modelo ha desvelado que ha necesitado ayuda psicológica. Acudir a un profesional ha sido su salvación y una forma de afrontar su vida de una manera más tranquila.
El sufrimiento de la empresaria al vivir lejos de su hija
«Me planté, porque las emociones no pueden venir de los demás. Yo soy un faro y quiero dar luz bonita, porque estoy en paz». Así hablaba la actriz, refiriéndose a la eterna pelea que ha tenido durante todos estos años con el padre de Naia.
Ocio se llevó el gato al agua y logró obtener la custodia total de la pequeña. Ahora, la joven vive con él en Bilbao, por lo que se ven menos de lo que la empresaria desearía. A pesar de todo, la andaluza confiesa que ambas están muy unidas.
La joven se lleva genial con su actual marido, David Ascanio, al que no ve como su padrastro ni el marido de su madre. Ambos han creado un precioso vínculo y esto es algo que le encanta a su madre.
Finalmente, la modelo rechaza volver a ser madre. «El bebé tendría mucha diferencia de edad con Naia y mi marido tampoco me lo pide. Para tener un hijo hay que tener ganas y yo tuve a Naia cuando las tenía», ha sentenciado.