En las últimas semanas, las hijas de Kiko Hernández han estado en el ojo del huracán tras la decisión de su padre de abandonar Sálvamepor un tiempo.
El tertuliano ha colapsado. Está viviendo el peor año de su vida tras sufrir tres pérdidas de personas muy cercanas y necesita apartarse de la televisión para tomarse un descanso.
Su deseo es centrarse en mejorar su bienestar personal y el de su familia, especialmente en lo que respecta a sus hijas Abril y Jimena.
Ante esta situación, se ha desatado la preocupación por las pequeñas. Mientras algunos cuestionan la capacidad de Kiko para cuidar de sus hijas en este momento tan complicado, otros alaban su decisión de dejar el trabajo para centrarse en ellas.
Cabe recordar que antes de la llegada al mundo de ambas niñas, el tertuliano de Sálvame ya había mostrado su intención de minimizar sus apariciones en la pequeña pantalla.
Aunque no se planteaba retirarse de la televisión, sí estaba dispuesto a reducir el ritmo de trabajo con el fin de dedicarle ese tiempo a sus hijas.
"Jorge Javier me ha pedido que no deje el 'Deluxe', que no corte el cordón umbilical con la tele. Y es cierto que necesito ingresar dinero. Lo más seguro es que continúe, pero no al mismo ritmo. Voy a cortar porque ahora tengo otras prioridades. Voy a reducir el ritmo de trabajo para dedicarme a ellas", decía Kiko en el año 2016 en una entrevista concedida a la revista Diez Minutos.
La decisión más importante en la vida de Kiko Hernández: tener a sus dos hijas
Hace ya cuatro años, las gemelas Abril y Jimena llegaron a la vida de Kiko Hernández a través de la gestación subrogada en Estados Unidos.
No fue una decisión nada fácil para el colaborador, que estuvo en el centro de las miradas por su elección de ser padre soltero a través de un vientre de alquiler.
"A mis 40 años estoy en una nube. Estoy disfrutando mucho del embarazo. Anoche estuve trabajando hasta las cuatro de la mañana y la gente me traía peluches y cosas que no me esperaba. Todo es alucinante...", decía Hernández por aquel entonces.
El colaborador tenía el gran deseo de convertirse en padre y no pensaba renunciar a él por nada ni nadie. Siempre ha hablado de su paternidad con extrema naturalidad, aunque optando por mantener la privacidad sobre sus hijas.
"Me voy a relajar bastante porque quiero darle normalidad. No hay por qué ser tan reservado, no lo veo sano ni para ellas ni para mí. Es una tontería que intente ocultarlas. Esto no quiere decir que a partir de ahora empiece a hablar de mi vida. Nunca lo he hecho", aseguraba Kiko en una entrevista concedida a Diez Minutos en noviembre de 2016.
En aquel momento, el exconcursante de Gran Hermano estaba viviendo el proceso de gestación de sus hijas desde la distancia.
Mientras Kiko estaba en España, la madre biológica de las niñas cursaba su embarazo en Estados Unidos. Al contrario de lo que sucede en nuestro país, allí la gestación subrogada es legal.
Kiko Hernández sobre la gestante de sus hijas Abril y Jimena: 'Es guapísima'
Durante todo el proceso, el tertuliano vivió muy pendiente la gestación de sus hijas. La comunicación con la madre fue constante durante todo el embarazo e incluso se desplazó hasta Estados Unidos un mes antes del parto.
"Tengo comunicación con la gestante todas las semanas a través de Skype. Es muy emocionante. Es una mujer guapísima y con un corazón inmenso. Me lo demuestra todas las semanas hablando con ella. (...) Espero que se parezcan a la madre, ¡por favor! La genética a la madre y la inteligencia al padre", aseguraba el colaborador de Sálvame.
De hecho, fue el propio Kiko Hernández quien eligió a la madre de sus hijas. Una elección que, según ha señalado, también fue mutua.
"Es una elección mutua, es decir, ella también me eligió a mí. A través de Skype me preguntó millones de cosas. Son mujeres maravillosas, que quieren ayudar a los demás y tienen una generosidad tremenda. No podemos olvidar que también es un riesgo para ellas...", aseguraba a Diez Minutos en la misma entrevista.