La polémica desatada tras la celebración de un acto benéfico multitudinario en un centro comercial en Marbella desató la cólera de muchos internautas en redes sociales por la aglomeración de personas en el espacio sin respetar la distancia de seguridad.
La propia policía tuvo que intervenir para desalojar el centro comercial y garantizar así la seguridad de quienes acudían a ultimar los preparativos navideños y realizar las últimas compras antes de la llegada de los Reyes Magos.
Pero quién le iba a decir a los clientes de La Cañada Shopping de Marbella que esa tarde, Fani Carbajo, Omar Montes, Luis Rollán y Kiko Rivera tenían preparado un espectáculo, el cual, en teoría se iba a realizar a puerta cerrada y solo para los medios de comunicación.
La lluvia de críticas para los tres Reyes Magos ← Omar, Luis y Kiko ← y la presentadora ← Fani ← no se hicieron de esperar. Aunque ellos recalcan que la culpa no es suya si no de la organización del evento, lo cierto es que sus nombres han salido a la palestra.
Rocío Flores, amiga de Fani Carbajo, también se personó en el centro comercial la tarde del evento para saludar a su compañera de Reality. Nadie se dio cuenta de verla: ni a ella, ni a su novio Manuel Bedmar que acompañaba a la influencer.
La nieta de Rocío Jurado supo cómo escabullirse entre la multitud para adentrarse en el camerino de Fani y saludar a los allí presentes. Sin embargo, la propia ex concursante de 'Supervivientes' 2020 le delató en su canal de MTMAD.
La bonita sorpresa de la hija de Antonio David Flores a su amiga se ha visto empañada por el aluvión de críticas hacia su persona por no respetar el confinamiento del municipio andaluz.
El segundo desliz de Rocío Flores
Rocío Flores reside en la ciudad de Málaga junto a su novio, desde hace cuatro años, Manuel Bedmar. Los tortolitos recorrieron aproximadamente 60 kilómetros hasta llegar al centro comercial donde se encontraba la amiga y compañera de reality de la hija de Antonio David Flores.
Por otro lado, Fani ha desvelado que el reencuentro quedó sellado con un emotivo y caluroso abrazo entre las dos influencer. Algo que llama especialmente la atención y hay a quien le rechinan los dientes al oírlo.
No cabe olvidar que en estos momentos debemos extremar las precauciones más que nunca. Los expertos alertan de que ya estamos adentrándonos de cabeza en una tercera oleada de coronavirus y que no vale que la sociedad se relaje en la batalla contra el virus.
La distancia de seguridad de un metro como mínimo es crucial para frenar la curva de contagio, al igual que lo son otro tipo de hábitos que todos deben adoptar como lavarse las manos, el uso de la mascarilla, limitar las reuniones,...
Aunque sí es cierto que Rocío Flores lleva la mascarilla puesta, Fani no. Por otro lado, a las chicas se les ha olvidado que los saludos en la actualidad se deben hacer codo contra codo. Cuanto menos contacto exista, mejor.
La nieta de Rocío Jurado se alejó del foco mediático desde que finalizó su aventura en Honduras, hace unos meses. Siguiendo en esa línea, Rocío Flores no se ha prestado a conceder declaraciones tras escaparse de Málaga hasta Marbella.
Fani pide perdón
Sin embargo, la novia de Christofer sí ha hablado en su canal de MTMAD sobre el acontecimiento y ha pedido disculpas a la sociedad y a los que se encontraban presentes en el evento por semejante revuelo.
«Antes de nada quiero pedir disculpas por lo sucedido, por cómo han sido los acontecimientos. Yo soy la primera que tiene miedo al coronavirus. Christofer, mi hijo Emilio y yo lo hemos pasado. Nosotros lo pasamos muy mal. No podemos bajar la guardia», dice Fani.
Eso sí, Fani ha insistido en que la responsabilidad de que se hiciera respetar las medidas de seguridad sanitaria no le correspondía ni a ella ni a sus compañeros.
«Fue un día intenso. Estoy muy disgustada por todo lo que se ha dicho en redes sociales. Nos quieren culpabilizar a nosotros por la aglomeración, nosotros somos unos pintamonas, por así decirlo, y tienen que culpar a alguien… Dentro de lo malo, espero que los niños se lo hayan pasado bien», explica la presentadora del evento.
No obstante, asume que, desde el escenario, debería haberse dado cuenta de que allí se estaban incumpliendo las normas y haber actuado. En cambio, justifica su pasividad con su estado de nerviosismo por la actuación.
«Este evento iba a ser cerrado, se fue de las manos, no queríamos formar lo que se formó pero también quiero decirle a la gente que nosotros no somos los culpables de lo que pasó, nosotros no organizamos nada», cuenta.
Además, añade que su intención y la de sus compañeros era divertirse, ya que no iban a cobrar por el evento. De este modo, se podría decir que la influencer resta importancia a su llamamiento en redes sociales a sus seguidores para que acudieran el evento. Según aseguran, el acto no se hizo como reclamo publicitario in situ.
«Nosotros fuimos para hacer algo benéfico, sin cobrar nada. Ninguno cobró, lo hicimos por divertirnos. Tenemos que tener muchísimo cuidado, está muriendo muchísima gente. Cuando estaba en el escenario no me di cuenta de toda la gente que había y cuando vi las imágenes me eché las manos a la cabeza. Tuvieron que llamar a la policía para que desalojara todo. Un poquito de cabeza, tenemos que ser conscientes de lo que está pasando», apostilla.