El Gobierno de Pedro Sánchez sigue explorando vías para aumentar los ingresos en plena crisis. Una de las medidas para conseguirlo es la reforma del régimen de autónomos, que pasa por modificar la cotización a partir de los ingresos reales de los trabajadores. La previsión es que en algunos casos la cuota mensual pase de 288,99 euros a 433,48.
El ministerio de Seguridad Social trabaja en una reforma del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) para equiparar las cotizaciones a los ingresos reales de los autónomos. La medida permitirá al Estado ingresar un 50% más: 5.055,95 millones de euros más cada año.
Este es uno de los principales objetivos del departamento que lidera José Luis Escrivá para aumentar la recaudación del Estado. En su plan se incluye la ambiciosa reforma de las pensiones y del sistema de Seguridad Social en su conjunto. El aumento de los ingresos del régimen de autónomos pasaría de 10.000 millones de euros de media al año a 15.000 millones, lo cual supone un incremento del 1,25% del PIB.
La subida prevista no afectará a todos los autónomos por igual, sino que dependerá de los ingresos de cada trabajador por separado. Los trabajadores por cuenta propia que sufren una sobrecotización verán rebajada su cuota mensual, pero los que pagan una cuota muy inferior a sus ingresos verán aumentado el pago mensual, hasta el doble.
El ministerio de Seguridad Social calcula que 2,1 millones de autónomos en España verán reducida la cuota mensual, mientras que 700.000 podría llegar a pagar el doble que ahora. Según los cálculos, si cogemos los 1.416,60 euros mensuales como ingresos reales medios, la cuota mensual pasaría de 288,99 euros a 433,48 euros.
Al aplicar este aumento al grueso de trabajadores que según lo previsto tendrán que pagar más se refleja un incremento de la recaudación de más de 5.000 millones de euros anuales. Esto supone un aumento de ingresos del 50% anual. La previsión del Gobierno es que la medida entre en vigor en 2022, de forma progresiva.
El Gobierno tiene claros su objetivo
La propuesta ha generado una gran polémica por las discrepancias entre los autónomos, uno de los sectores más afectados por la crisis económica. Ante las críticas, el Gobierno se agarra a las recomendaciones del Pacto de Toledo aprobadas en sede parlamentaria el pasado otoño y en las que se incluye la reforma del sistema de autónomos.
En las recomendaciones se contempla la posibilidad de «promover, en el marco del diálogo social, medidas para aproximar las bases de cotización de los trabajadores autónomos a sus ingresos reales, de manera que no se vean perjudicados los elementales principios de contributividad y de solidaridad que son fundamento del sistema».
La reforma del régimen de autónomos, incluida en la reforma del sistema de pensiones, se enmarca en las exigencias de Bruselas a España para recibir los millones de los fondos de recuperación. En el plan de reformas del Gobierno «se trata de implantar gradualmente un nuevo sistema de cotización basado en los rendimientos por la actividad desempeñada».
Con ello, el Gobierno pretende corregir la distorsión causada por la posibilidad del trabajador autónomo de escoger la base de cotización. Esto lleva en muchos casos a cotizar muy por debajo de los ingresos mensuales, lo cual «supone una merma de recursos para el Sistema y un nivel bajo de protección para los autónomos».
Casi 200.000 autónomos, condenados al cierre
El aumento de la recaudación es un objetivo primordial para el Gobierno de España ahora mismo, ya que la sucesión de nuevas oleadas de coronavirus hace que se alargue la crisis y los mecanismos de rescate de los trabajadores y los autónomos que supone un desembolso de dinero público por parte del Estado.
Según las previsiones oficiales, ni los trabajadores en ERTE ni los autónomos que cobran la prestación extraordinaria por cese de actividad podrán recuperar sus empleos en los próximos meses. El ministerio de Seguridad Social calcula que unos 167.000 trabajadores se sumaron a los ERTE en el último mes, 878.000 durante la tercera ola. Además, 283.848 autónomos perciben a día de hoy la prestación por cese de actividad.
En cuanto a los autónomos, la asociación ATA calcula que un 50% de los que cobran la ayuda no podrá salir adelante una vez se agote la prestación. Esto quiere decir que 191.924 autónomos están condenados a cerrar en los próximos meses. Su única esperanza es que lleguen pronto las ayudas europeas, pero estas tienen unas contrapartidas, y los autónomos podrían ser los primeros en sufrirlas con el aumento de las cuotas.