El coronavirus continúa dejando a su paso consecuencias realmente devastadoras. La última y una de las más llamativas, la ocurrida en el país vecino de Portugal.
Drama familiar en la zona al conocer la triste noticia de que un padre, una madre y su hijo han fallecido por COVID-19 después de rechazar la vacuna. De esta forma lo ha desvelado el diario Wales Online.
Tal y como lo ha explicado otro de los hijos de la familia, los progenitores eran pacientes de riesgo. Además, estos últimos se negaron a ponerse la vacuna contra este virus.
Francis, quien actualmente vive en Cardiff, cuenta en el medio anteriormente citado que su hermano invitó a sus padres a su apartamento de Portugal el pasado 8 de julio. A partir de aquí, pocos días después estos mismos comenzaron a sentirse mal e ingresaron en el hospital el 12 de julio.
Continuaban enfermos cuando el hermano, en los días posteriores, se dispuso de urgencia a viajar a Portugal desde Gales. El motivo no era otro que ir a visitar a su hermano, ya que vio cómo la novia de este le llamaba de urgencia para darle la noticia. Le contó que su hermano había entrado de urgencia en la UCI el 17 de julio.
Lamentablemente y para sorpresa de muchos, al día siguiente falleció a la una de la madrugada.
Cabe destacar que las malas noticias solo acababan de empezar. Y es que, a los tres días de la muerte de su hermano, Francis también perdió a su padre a consecuencia del coronavirus. Y no solo eso, sino que apenas le dio tiempo a llegar a Portugal para estar con su madre.
La progenitora estaba agonizando en el hospital y aunque pudo verla antes de que falleciera, el 24 de julio también murió por culpa de la COVID-19.
Los antivacunas
“Nunca habían traído tres cuerpos juntos de la misma familia”, explicó Francis haciendo referencia a lo que le dijo parte del personal del cementerio.
El joven contó al medio que había enterrado a sus familiares uno al lado de los otros en un cementerio de Lisboa. Un espacio creado especialmente para honrar la memoria de los fallecidos por coronavirus.
Por otro lado, en su regreso a Cardiff, Francis lamenta toda esa propaganda antivacunas que navega por las redes sociales y así como por toda la población mundial.
Una propaganda que tal y como él mismo ha explicado, su familia se vio envuelta. “La propaganda se aprovecha de las personas que tienen miedo y caen en la trampa”, añade.
Así mismo, no ha querido desaprovechar la ocasión y las fatales consecuencias que el virus ha ocasionado en su familia para hacer un llamamiento generalizado.
Una llamada a la población para que se vacune y no caigan en esas teorías conspiratorias. Suposiciones a las que cada vez se suman más adeptos y que apuestan por no recibir las dosis.
El coronavirus en Portugal
El impacto de la cuarta ola de la COVID-19 sigue en descenso en Portugal. Aquí, desde este lunes se registró una nueva bajada en la tasa de incidencia a 14 días.
En estos momentos se sitúa ya en 336,1 casos por 100.000 habitantes, aunque repuntó levemente el número de pacientes hospitalizados.
En las últimas 24 horas, el país, de 10 millones de habitantes, suma 18 muertes. Haciendo referencia a estas últimas, ocho más que la jornada anterior, y 1.094 nuevos contagios. Según los datos del último boletín de la Dirección General de Salud (DGS).
Por otro lado, y con respecto al fin de semana, cabe destacar que es un número de infecciones ligeramente menor al obtenido durante el pasado domingo (1.982).