Día a día el Covid sigue cobrándose vidas cuando ya ha transcurrido más de un año desde que se decretara el fenómeno de pandemia global. Una de estas trágicas historias la ha protagonizado Charles 'Charley' Torres, quien utilizó sus últimas fuerzas para despedirse de sus hijos antes de sucumbir a la enfermedad el pasado mes de febrero.
El norteamericano que permaneció desde el 15 de enero ingresado en el hospital —prácticamente un mes— no pudo combatir el virus que terminó por cobrarse su vida. Durante su estancia, en las últimas horas antes de perecer, empleó su último aliento para mandar un mensaje desgarrador, pero lleno de amor hacia sus hijos.
«Os quiero con todo mi corazón. Os quiero tanto. Debéis saber que papá os quiere. Todo va a estar bien. Cuidad de vuestra madre» decía el hombre en su testimonio gráfico que recoge 'Telemundo'. Son siete los jóvenes que el virus deja sin padre a causa de una pancreatitis que ya había sufrido en 2010, pero que según investigan los forenses podría haber sido causada o agravada por derivaciones del Covid.
Una familia rota
'Charley' Torres vivía en Manvel, Texas y falleció con tan solo 35 años. Durante su estancia en el instituto fue un Eagle Scout y ejercería profesionalmente en el Departamento de Bomberos Voluntarios de la misma ciudad que le vio nacer. Su familia más cercana señalan su empatía y solidaridad como virtudes inherentes a él. De hecho, también trabajaba como especialista en Asistencia de Desastres.
«Siempre ha ayudado. Ha hecho tantas cosas por la gente. Siempre decimos 'El corazón de Charley es más grande que su cuerpo» comenta su madre, Joanie Torres en una entrevista para KTRK-TV.
Graba un video para sus hijos antes de morir por COVID-19 | Noticias Telemundo
Su padre prefiere recordar que aunque ya no esté presente y el virus se lo ha llevado, siempre le tendrá cerca. «Entró y nunca salió. Es como perder tu sombras. No importa a dónde vayas, lo tienes apoyándote todo el tiempo» señala el cabeza de familia.
Charley falleció el día 14 de febrero tras un mes ingresado. El primer diagnóstico que se determinó se inclinaba por un episodio pancreático intenso, que ya había sufrido en 2010 y del que se pensaba que había recaído, pero finalmente fue era Covid. «Nunca piensas que te va a pasar. He estado rezando a Dios toda mi vida para que nunca sobreviva a mis hijos» concluye el relato de su padre.
Otras historias trágicas
El coronavirus también se ha cobrado más historias trágicas, como la de María Isabel Bueno, una médica española que falleció precisamente luchando contra el Covid. La sanitaria era directora de Atención Primaria del Área de Salud de Plasencia, en Cáceres. La doctora Bueno se habría infectado mientras sustituía a una compañera del equipo de vacunaciones, según explicaba en sus redes sociales el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara. Así lo comunicaba el representante político en sus redes.
Han sido muchas las despedidas emotivas que dejó su marcha, pero la que más ha impactado es la que le dedicó una compañera de trabajo en 'El Periódico de Extremadura'. Otro de los casos más traumáticos es el que protagonizó una familia a las puertas del hospital de Ciudad de México.
En el relato gráfico se muestran los gritos desesperados de la familia porque el hombre recibiera algún tipo de asistencia sanitaria. «¡Todavía sigue vivo, ayúdennos! ¡No es Covid! ¡Se lo suplico por favor!» eran algunos de los gritos que pronunciaba el hijo del varón. Durante 30 minutos pidieron la asistencia médica que nunca llegó. Ante la nula respuesta intentaron como sabían reanimarlo a través de una maniobra cardiopulmonar, sin éxito alguno. Finalmente el hombre falleció en el acto y en la actualidad aún se está investigando si se realizó algún tipo de negligencia sanitaria.