La pandemia de coronavirus vive un momento muy peligroso en nuestro país. España acaba de vivir el final de las fiestas navideñas y la realidad que reflejan los datos comunicados por las comunidades y el ministerio de Sanidad es de un imparable crecimiento del número de contagios que en pocos días podría llevar a una nueva saturación en los hospitales que ya empiezan a denunciar su preocupación.
Como es lógico, y ante este panorama, la decisión de muchos gobiernos autonómicos una vez ya han pasado los días festivos, siendo el último el día de Reyes este pasado miércoles, ha sido de endurecer sus restricciones. El objetivo de todos es muy claro: frenar ya la subida de casos y minimizar ya la tercera ola, pues parece que prácticamente se tiene asumido que está ya ha empezado.
Uno de los últimos en tomar decisiones drásticas ha sido el gobierno de Murcia. Y es que no ha querido esperar ni un día más en confirmar nuevas medidas para toda la región que entrarán en vigor nada más se publiquen en el Boletín Oficial de la Región de Murcia (BORM).
Una de las más restrictivas vuelve a estar relacionada con la movilidad durante las horas nocturnas. Y es que la región de Murcia se suma a otras partes de España y adelanta su toque de queda nocturno. Este pasará de las once a las diez de la noche en las próximas horas.
La noticia ha sido anunciada por el presidente murciano, Fernando López Miras que ha insistido que la situación que vive su comunidad, pero también el resto del país es «preocupante». «No se podrá salir a partir de esa hora y cesará toda actividad, salvo la considerada esencial o las excepciones contempladas en la normativa vigente», confirmaba sobre esta nueva medida restrictiva.
López Miras insistía que en estos momentos se vive «uno de los momentos más delicados de la pandemia. En los últimos días el número de los contagiados se ha duplicado». Aunque ha dejado claro que estas y otras son medidas difíciles de tomar, la realidad es que son necesarias, ya que «no hay nada más importante que salvar vidas» y volvía a asegurar que «son efectivas y dan resultado»
El presidente murciano ha hecho un llamamiento directo a la «responsabilidad individual» y al «compromiso» de los murcianos. Recordaba que es imposible controlar a todo el mundo: «No puede haber un policía en cada casa, en cada local o cada establecimiento».
A su vez, lanzaba un mensaje para los padres una vez en las próximas horas se producirá la vuelta a las aulas de sus hijos tras las vacaciones navideñas. Le pedía que «extremen las precauciones» y recordaba que ningún niño que estén contagiados, con síntomas o en cuarentena «no deben volver a las aulas bajo ningún concepto».
Gran parte de los murcianos no podrá salir de su municipio
Pero el cambio en su toque de queda no ha sido la única medida anunciada hoy por Murcia. Siguiendo el ejemplo de otras comunidades, el gobierno murciano ha anunciado el cierre perimetral municipal de casi todas las poblaciones de la región.
Entre las poblaciones de las que no se podrá salir ni entrar, salvo las excepciones, se encuentra Murcia Capital y el resto de localidades de más de 50.000 habitantes: Cartagena, Lorca y Molina de Segura. Junto a estas el resto de municipios, hasta 22 en total, que estarán cerrados son: Albudeite, Los Alcázares, Alguazas, Archena, Ceutí, Cieza, Fortuna, Jumilla, Lorquí, Moratalla, Mula, San Pedro del Pinatar, Santomera, Las Torres de Cotillas, La Unión, Villanueva del Segura y Yecla. En ellos vive un 80% de la población de Murcia.
En todas estas poblaciones los comercios reducen su aforo al 50% y se cierran los centros de día. Por su parte, se cierra el interior de todo tipo de restaurantes y bares, además de las secciones de hostelería de casinos o salones de apuestas.