La madrugada del pasado 6 de junio de 2021, la vida de Argamasilla de Alba (Ciudad Real) cambió para siempre. En una calle de su centro urbano perdieron la vida tres jóvenes. Marta (16), Gonzalo (20) y Emous (21), fueron asesinados por un kamikaze.
La herida sigue abierta en Argamasilla y Tomelloso, las localidades de donde eran naturales las víctimas. Sus familias sufren especialmente el dolor de su pérdida en tan trágicas circunstancias. Han abierto una recogida de firmas para modificar el código penal.
Marta tenía 16 años y era de Tomelloso. Gonzalo, de 20 años, y Emous, de 21, eran de Argamasilla de toda la vida. La noche fatídica estaban celebrando el cumpleaños de un amigo, y decidieron ir a por pizzas y más bebida. De vuelta, se encontraron con la muerte.
Un chico de 22 años y natural de Montehermoso (Cáceres) había estado visitando a unos familiares en Argamasilla. De madrugada se puso al volante bebido y drogado, y en pleno centro urbano, en una zona limitada a 30 km/h, se puso a 140.
Se saltó siete ceda el paso hasta impactar con el coche en el que viajaban los tres jóvenes, junto con dos amigas más. Silvia y Natalia quedaron gravemente heridas. También la copiloto del kamikaze, una chica de 17 años natural de Argamasilla.
El autor de los hechos salió ileso
El balance del accidente es dantesco: tres jóvenes muertos y tres chicas heridas graves que sufrirán secuelas físicas y psicológicas de por vida. El presunto culpable salió ileso. Se trata de una gran injusticia a la que ahora quieren hacer frente los familiares de las víctimas.
En su comunicado dejan claras sus intenciones: «Pedimos justicia por ellos y por todos, porque esto nunca vuelva a sucederle a nadie más. Un hecho tan atroz y aberrante no puede ser considerado un homicidio imprudente, esto son tres asesinatos y así debe ser juzgado este individuo».
Por eso piden que la reforma del Código Penal, para que hechos como este sean penados como homicidio doloso agravado. Han empezado una recogida de firmas para impulsar este cambio en la legislación. Y quieren que el mensaje llegue a todos los rincones.
Penas de cárcel más abultadas
Las familias de Marta, Gonzalo y Emous piden al Gobierno de España la modificación de varios artículos del código penal. La intención es castigar con más dureza la imprudencia de los kamikazes. Quieren proteger así a las víctimas de estos accidentes.
La petición incluye modificar el artículo 138 del Código Penal en su artículo 2. Piden que se considere este tipo de delitos contra la seguridad vial como homicidio doloso agravado. Esto conllevaría penas de cárcel más abultadas para los infractores.
También quieren cambiar el artículo 379: «Si para circular la tasa límite de alcohol en aire aspirado es de 0,25, ¿cómo es posible que alguien circule con su vehículo con temeridad, provoque un accidente, y solo sea juzgado por una pena máxima con una tasa de 0,60?».
Señalan que esto es una contradicción manifiesta en nuestras leyes y proponen bajar el límite a 0,25. Es decir, que modificando este artículo todos los accidentes con una tasa de 0,25 por parte del infractor sería juzgado con la pena máxima.
Retirarles el carnet de conducir de por vida
Por otro lado, piden que en el artículo 381 se castigue con la pena máxima «a quienes manifiestan desprecio por la vida ajena, incluida la suya». En este caso se les retiraría el carnet de conducir de por vida, al entenderse que ponen en riesgo vidas humanas.
Finalmente, en su petición se incluye la modificación del artículo 382 del Código Penal. En este caso, piden que no se tome en cuenta sólo la infracción con la pena más grave sino todos los delitos recogidos en el 379, 389 y 381 considerados individualmente.
En este caso, consideran que «son hechos de extrema gravedad por los cuales fallecen personas a cada momento». Su intención es hacer justicia en el caso de Marta, Gonzalo y Emous. Pero sobre todo, que tragedias como esta no se vuelvan a repetir.