Numerosas son las personas que se han negado y se siguen negando a ponerse la vacuna contra el COVID-19. Su postura, en muchos casos, se sustenta en una teoría de la conspiración que viene a exponer que detrás de aquella hay intenciones 'oscuras'. Y esto es lo que ha llevado ahora a que una madre y su hija mueran a causa del coronavirus.
En concreto, han fallecido en la misma sala de hospital con pocos días de diferencia y dejando a toda su familia realmente hundida. Nos estamos refiriendo a Heather Maddern y a su hija de 32 años, Sammie-Jo Forde, que deja huérfanos a cuatro menores.
Madre e hija y su postura contra las vacunas
Muchos son los ciudadanos famosos y anónimos que se han mostrado en contra de las citadas vacunas. Y entre estas estaban Heather y Sammie que, además de esta postura, tenían en común ser trabajadoras sociales en Irlanda. De ahí que estaban entre los primeros grupos que debían recibir las mencionadas, pero las rechazaron.
Desde el primer momento dejaron claro que no querían saber nada de aquellas. Incluso Maddern no dudó en más de una ocasión, como explica Informativos Telecinco, en usar las redes sociales para dejarlo claro. Sí, realizaba publicaciones negacionistas o incluso afirmando que había enfermeras a las que despedían si no querían vacunarse.
Es más, llegó a compartir incluso vídeos de famosos que alertan del peligro de que los niños reciban las vacunas contra el COVID-19.
Sus ideas eran firmes y estas las han llevado ahora a perder la vida. Sí, porque se contagiaron de coronavirus y tuvieron que ser ingresadas de urgencia en el Hospital de Belfast. Un centro sanitario donde han perdido la vida en la misma habitación y con solo unos días de diferencia.
La familia de Heather Maddern y Sammie-Jo Forde está devastada
Como no podía ser de otra manera, los seres queridos de las dos fallecidas están devastados por lo sucedido. Y así lo ha afirmado el exmarido de la madre y padre de la joven, Kevin McAllister.
Él ha concedido varias entrevistas a medios de comunicación, como BBC News, y ha dejado de manifiesto su dolor. Lo ha hecho diciendo: “Lo sucedido acaba de destrozar mi mundo porque perdí a mi hija, mi mejor amiga. Nunca, nunca, pensé que enterraría a mi hija”.
De la misma manera, ha hablado sobre la muerte de Sammie-Jo y ha zanjado rumores que existían. Así, ha expuesto que la joven no sufría ningún tipo de patología previa. A esto ha añadido: “Simplemente, al final, sufrió una insuficiencia cardíaca porque no podía sobrellevarla”.
En este punto ha recordado que fue ella la que le dio la noticia de la muerte de su madre. Ha contado que “me envió un mensaje de texto para decírmelo. Solo estaban separadas por dos camas”.
“Luego, me envió más mensajes para decirme que estaba bien. Y yo le contesté que cuando volviera a casa le prepararía una fritura y tomaríamos una cerveza. Después, le envié otro para decirle que compraríamos un bocadillo 'de scooby'”.
“Y es que hace años salíamos a tomar un bocadillo de esos antes de acostarnos”.
Pero ha ido más allá. En plena expresión de su sufrimiento ha dejado claro que no entiende la postura que mantuvieron las dos de no vacunarse. Ha dicho: “Las personas que no están recibiendo la inyección contra el coronavirus, no están pensando en las otras personas que dejan atrás”.
“No podré quitarme jamás de la cabeza el porqué mi hija no se vacunó. Me perseguirá el resto de mi vida...Ojalá la gente escuchara a los expertos”.